Chao reinas

Rocío Silva

Los municipios de Quito y Latacunga, han planteado que no se elegirá reinas para este año 2019, los motivos expuestos se relacionan con el costo que implica tal elección y con un concepto de reconvención cultural y social sobre la cosificación de la mujer.

Si bien la construcción social de la belleza femenina en los reinados de belleza cantonales y nacionales, está atravesada por imaginarios culturales que a la larga se afincan en estereotipos occidentales, en los cuales el contexto y proceso social de la cultura construye al sujeto, en este caso sujeto-símbolo, llamado reina.

No se podría señalar hasta que punto, son acertadas estas medidas que buscan generar nuevas formas de relacionamiento social, en este caso moldeadas por las fuerzas políticas, ahora se dice que los patrocinadores no cumplían con su oferta, que hay cánones de belleza occidental a los cuales no todas las muchachas tienen acceso y que por ello son discriminadas; y es algo que no se entiende, porque todas las candidatas –desde el más insignificante reinado, hasta los nacionales- acuden al maquillaje de moda tipo tutorial, y suelen presentar una uniformidad en sus rostros.

El cambio conceptual pretende ser muy drástico, quedan como inquietudes ¿Qué habría sucedido si los candidatos a alcaldes: Yunda y Cárdenas, proponían en sus candidaturas la supresión de reinas? ¿Habría sido su mejor carta de presentación electoral?; posiblemente no, y peor todavía si en cada parroquia que visitaban eran recibidos por sus reinas y fotografiados con ellas.

Sería necesario hacer una encuesta a las jovencitas y niñas sobre el tema, es decir a quienes sueñan con llegar a ser reinas del barrio, la liga deportiva, la ciudad, el país; en quienes la sociedad y el medio colocó durante muchas generaciones, dispositivos que al ser activados, expresan los códigos de la cultura social para el protagonismo en una sociedad de consumo y producción de una belleza tan efímera, pero que ha logrado generar toda una cadena de producción económica de la cual se benefician muchos sectores artesanales como modistas, peluqueras, maquilladores, diseñadores, fotógrafos, entrenadores; entonces ¿Cuál es la alternativa?