La discapacidad física que tiene José Quinatoa ha hecho imposible que pueda conseguir trabajo, motivo por el cual, este hombre, oriundo de Quisapincha, optó por vender limones en el centro de la ciudad.
Con su silla de ruedas espera paciente cerca de la Catedral de Ambato a quienes deseen colaborarle con un dólar, valor de la funda de limones que le sirven para mantener a su esposa y a sus dos hijos.
El accidente que José sufrió hace 20 años no ha permitido que obtenga un trabajo estable en todo ese tiempo, aunque según dijo, ha dejado varias hojas de vida en empresas de la ciudad.
“Hay días que no se gana nada, pero no estoy robando y este trabajo me ha servido para darles el estudio a mis hijos”, indicó Quinatoa.
Según datos del Consejo Nacional para la Igualdad de Discapacidades (Conadis), en Tungurahua se registran 13.240 personas con discapacidad, de esta cantidad 7.780 están entre los 18 y 65 años, edad en la que podrían trabajar.
En la provincia se contabilizan 1.638 personas con discapacidad laboralmente activas, de ellos el 49,88% tienen discapacidad física, el 21,31% auditiva, el 16,36% visual y el 9,95% discapacidad intelectual.
Opción
En el Conadis existe un servicio de inclusión laboral en el cual personas con discapacidad pueden postular por diferentes trabajos mediante una base de datos, a través de esta modalidad se capacita a estas personas en diferentes áreas y también para que puedan implementar sus emprendimientos.
Diana Freire, analista de orientación laboral, mencionó que se ha trabajado con el Conadis y con el Ministerio del Trabajo para ubicar a personas con discapacidad en el ámbito laboral.Los interesados en ser
parte de este servicio pueden acercarse a las oficinas del Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (Miduvi), cuyas oficinas están ubicadas en la calle Martínez frente al parque Cevallos desde las 08:00 hasta las 17:00 para ser asesorados de manera gratuita.
Situación
Diego Villacrés es no vidente y trabaja actualmente en la Universidad Central del Ecuador, según dijo, las personas con discapacidad no tienen perfiles profesionales competitivos para ser parte de concursos de méritos y oposición para ostentar un cargo en el sector público.
“Lamentablemente la falta de oportunidades laborales en términos formales les lleva a optar por otras alternativas de trabajo que les permita su sustento diario”, dijo Villacrés. (RMC)