“Como gremio nos vamos a hacer sentir, no podemos quedarnos de brazos cruzados ante la competencia desleal que quiere venir a Ambato”, señaló Giovanny Sánchez, presidente de la Unión Provincial de Taxistas de Tungurahua ante el uso de Uber en la ciudad.
El dirigente gremial señaló que las transnacionales que vienen y trabajan bajo esa modalidad no pagan un solo impuesto y todas las ganancias que obtienen las envían a paraísos fiscales, causándole grandes prejuicios al sector al que representa como al mismo Estado.
Añadió que al momento, por estar a las puertas de un proceso electoral, no pueden hacer nada, sin embargo, seguirán reuniéndose para ver qué acciones tomar ante la presencia de este tipo de servicio informal que se está prestando en la ciudad.
“Tenemos que esperar a que se designen las nuevas autoridades cantonales para poder tener acercamientos con ellos para evitar el funcionamiento de este tipo de servicio de transporte público”, añadió Sánchez.
Desde el Municipio
Nelson Guamanquispe, presidente de la Comisión de Transporte y Movilidad del Concejo Municipal de Ambato, señaló que no habían tenido conocimiento de que Uber ya estaba funcionando en Ambato.
Para conocer la realidad de este servicio y de lo que implicaría su presencia en la ciudad desde las 11:00 de hoy la Comisión en conjunto con los responsables la Dirección Municipal de Tránsito y Transporte se reunirán.
“No tenemos conocimiento de la situación actual, hasta la Comisión no ha llegado nadie o nada que represente a Uber y hasta el momento no sabemos si ellos están o no gestionando los permisos que se requieren para laborar de manera legal en la ciudad”, añadió el edil.
Adicionalmente señaló que en caso de no contar con los permisos la Municipalidad debería tomar medidas administrativas respecto al tema.
Diversas opiniones
Entre la comunidad existen opiniones divididas respecto a la presencia de Uber en la ciudad. Esteban Lalaleo, asesor comercial, señaló que para que puedan hacerle frente a esta nueva empresa los taxistas deberían mejorar su servicio.
“Alguien que se siente bien no va a cambiar de proveedor, y muchos taxistas dejan mucho que desear desde la misma presentación de sus unidades, y ni que hablar del trato que nos dan”, señaló Lalaleo.
Algo similar cuenta Gloria Ordóñez, quien vive en la zona rural de la ciudad, y asegura que los taxistas no quieren ponerle el taxímetro aun cuando la ley dice que eso es obligación en todo el cantón.
Sobre el tema Sánchez comentó que ellos brindan capacitación permanente a sus socios para que den un servicio de calidad y con calidez a sus clientes, y respeten todas las normativas de tránsito para evitar malestar entre la comunidad. (NVP)
LA CIFRA
2.464 taxis cooperados hay en Ambato.
TOME NOTA
Un taxista cooperado gasta entre 500 y 600 dólares anuales con el pago de impuestos y todo lo que representa ser transportista público legal.