Hombre muere aplastado en un accidente laboral en Píllaro

ACCIDENTE. El cadáver quedó entre la mitad de su grúa camión y una plataforma.
ACCIDENTE. El cadáver quedó entre la mitad de su grúa camión y una plataforma.

La cabeza de Gonzalo C., de 51 años, quedó aplastada en la mitad de un camión grúa y una plataforma, el hecho ocurrió tras un fatal accidente laboral.

El camión grúa era de la víctima y habría llegado la tarde de ayer para la entrega de adoquines entre las calles José María Urbina y vía a Patate, centro de la parroquia Emilio María Terán en Píllaro.

El siniestro ocurrió cuando se rompió el retenedor del sistema hidráulico del pie de apoyo del camión, ocasionando que todo el peso caiga sobre la parte izquierda donde estaba el chofer.

Aunque los trabajadores del lugar intentaron socorrerlo, lamentablemente la cabeza de Gonzalo quedó aplastado entre los dos carros pesados, llevándole finalmente a su deceso aproximadamente a las 12:30.

Ayuda

Aún con la esperanza que el afectado pudiera sobrevivir, los trabajadores del lugar se comunicaron con el ECU 911 con el fin de que enviaran a las unidades de emergencia.

Al lugar asistieron miembros del Cuerpo de Bomberos de Píllaro, los que penosamente notificaron su muerte.

Estas imagines desgarradoras fueron vistos por los habitantes de este sector, por lo que uno de ellos prestó una sábana con el fin de tapar el cuerpo hasta su levantamiento.

En el interior de este camión grúa faltaban pocos adoquines de descargar, los que serán utilizados en la construcción de aceras y bordillos de este sitio.

Dolor

Antonio C., hermano de la víctima y contratista de la obra, mencionó que Gonzalo llegó a este sector fletado para la descarga de este material.

“Nosotros somos de Ambato y habitamos cerca de la Policía Nacional, pero por razones laborables junto a mi hermano llegamos hasta Píllaro”, agregó Antonio.

La víctima deja dos hijos en la orfandad, “de cariño le tratábamos como Gonzalito, siempre tenía cuidado en manejar en las carreteras, pero fue este percance el que le arrebató la vida”.

Otros hermanos y familiares también llegaron al sitio del percance, ellos no podían creer que una falla mecánica llavara a Antonio a la tumba.

Compañeros

“Yo estaba en el sitio del suceso cuando suscitó esta desgracia, el chofer me imagino que ya habría notado que algo extraño, por lo que se apegó a la puerta y ahí es cuando la cabeza quedó comprimida”, relató Efraín Cando, trabajador de esta obra y habitante de la parroquia San Andrés de Píllaro.

También aseguró que quisieron ayudarle pero esta muerte fue instantánea y no se pudo hacer nada más, “Me acuerdo que lo único que exclamó es ¡No! y posteriormente cayó”.

Procedimiento

Al sitio del suceso arribaron personal de la Policía Nacional, quienes comunicaron del particular al Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) de Tungurahua, pero al llegar ellos reconocieron que este suceso no era producto de un siniestro, sino de un hecho laboral.

Por este particular informaron a los peritos de la Dirección de Muertes Violentas (Dinased) y Criminalística quienes con autorización de la Fiscalía de Píllaro procedieron con el levantamiento.

El cuerpo fue ubicado en la ambulancia de Medicina Legal en medio del dolor de sus familiares, el que luego lo traslado hasta el Centro de Investigaciones Forenses para la necropsia de ley. (EV)