Desde el fatal accidente ocurrido el pasado 15 de agosto suscitado en la vía Pifo-Papallacta, el cual enlutó a 24 familias y en el que también existieron 22 heridos. El presidente, Lenin Moreno, anunció que realizará una inversión de 50 millones de dólares para colocar 500 radares más en las carreteras del país, con el fin de controlar la velocidad.
Tungurahua, no es la excepción ante esta decisión presidencial, por lo que la Unidad de Tránsito de la Policía presentó un informe de los sitios con mayor accidentabilidad en la provincia.
Son 12 lugares ubicados en las entradas y salidas de Ambato, como también en los cantones de Tisaleo, Pelileo y Baños.
A estos radares se suman los que tiene el Municipio de Ambato dentro de la ciudad, los cuales se encuentran ubicados en el parque El Sueño, Huachi Belén, Los Tres Juanes, avenida Bolivariana, Terremoto y en la Manuelita Sáenz.
El Ministerio de Transporte y Obras Públicas (MTOP), será la entidad encargada de la adjudicación a una empresa para el manejo de estos dispositivos.
Aún no existe una fecha para la instalación de los radares, pero la Policía comenzará con campañas de socialización y prevención ante este proyecto aprobado a nivel nacional.
Planificación
El capitán Diego Barclay, jefe de la Unidad de Tránsito de Tungurahua, dijo que ya presentó su informe de los puntos críticos de accidentabilidad en la provincia, tanto a la Dirección Nacional de Tránsito como al MTOP.
“Logramos determinar esos sitios peligrosos a través de las estadísticas de accidentabilidad, movilidad y mortalidad de acuerdo a los partes realizados por los funcionarios policiales”, aseguró Barclay.
De los 12 sitios, el Jefe de Tránsito aseveró que: Cunchibamba, Las Viñas y el Paso Lateral del sur son los lugares con mayor accidentabilidad.
“Con la ubicación de estos radares vamos a reducir notablemente la accidentabilidad en la provincia por las sanciones aplicadas a la comunidad, que va desde la pérdida de puntos hasta la prisión”, aclaró Barclay.
Finalmente destacó que la ubicación de estos radares servirá como apoyo para la labor preventiva y de control que realizan diariamente los uniformados.
Apoyo
René Urrutia, presidente de la Unión de Cooperativas de Transportes de Tungurahua, dijo que no se opone a la ubicación de radares, ya que aquello precautelará los intereses tanto de los propietarios de los buses y a los que se transporta como son los pasajeros.
El Presidente, además, manifestó que existe el temor de arriesgar el capital o patrimonio familiar en conductores que no se merecen estar frente a un volante.
“En Tungurahua somos 5.000 conductores en servicio interprovincial e intraprovincial. Por lo que apoyamos a cualquier proyecto que precautele la vida de las personas”, finalizó Urrutia.
Dispositivos
Las cámaras tendrán la capacidad de leer las placas de los vehículos y mediante un computador enlazarse con la base de datos de la Agencia Nacional de Tránsito (ANT), para conocer información detallada sobre el automotor como vigencia de matrícula, multas o si ha sido declarado robado.
El exceso de velocidad dentro del rango moderado está considerado como una contravención de tránsito de cuarta clase, multa del 30% del Salario Básico Unificado (SBU) y reducción de seis puntos en la licencia de conducir.
En cambio, el exceso de velocidad fuera de rango moderado es una contravención de tránsito de primera clase, tres días de privación de libertad y una multa de un Salario Básico. (EV)