Nuevas refundaciones

A medida que pasa el tiempo no solo se va ratificando la serie de denuncias de persecuciones, robos, malversaciones, sobreprecios, obras innecesarias inconclusas o mal hechas, ocurridas en la década pasada. Es tanta su cantidad y variedad que desbordan los medios y las redes sociales y, sin embargo, aún quienes hemos sido víctimas de sus espantosos odios y maldades, no podríamos generalizar haciendo responsables a todos los que integraron el anterior gobierno, muchos de los cuales están tapiñados en la actual administración.

Si bien existen culpables por acción y otros por silencio cómplice, el momento exige una prudente reflexión para no caer en una cacería de brujas. Los actuales organismos reformados y sus integrantes no pueden tener prejuicios contra todo lo anterior. Hay que devolverles la independencia y responsabilidad a las diferentes funciones del Estado. Interferir en todas sus acciones, barrer con sus funcionarios y hasta revisar fallos no es más que regresar a la barbarie del pasado que, como dice el refrán, “cada cual con su cada quien”. Aunque el poder dado en las urnas es claro y amplio, tampoco puede ser interpretado con una concentración absoluta del poder ni con facultades ni funciones sobre las normas constitucionales y legales vigentes.

Las evaluaciones, remociones y nuevos integrantes no pueden retrotraerse solo a actores sociales y políticos desactualizados o como simple recuerdo de un pasado que no puede regresar. Detener el desarrollo de la historia o aferrarse al pasado son un búmeran que permitiría que, quienes mal gobernaron en la última década, se confundan y pretendan salir de la basura de la historia y sueñen en regresar al saqueo y al uso indebido del poder.


Nunca había juzgado a la gente por sus ideas, sino por sus comportamientos”. Ángeles Caso Escritora española (1959)

Las influencias aparecen al principio, pero llegados a un cierto punto, terminan”. Herbert Von Karajan Director de orquesta austríaco (1908-1989)