Niños maltratados buscan huir de sus casas

Los niños que escapan de sus hogares por causa de la violencia se enfrentan a otros riesgos sin que nadie vele por su estabilidad.
PELIGRO. Los niños que escapan de sus hogares por causa de la violencia se enfrentan a otros riesgos sin que nadie vele por su estabilidad.

Viviana (nombre protegido) fue reportada como desaparecida el 21 de septiembre, la niña tiene 7 años y la última vez fue vista por sus vecinos mientras caminaba con una maleta en la mano.

La menor vivía con su padre hasta cuando desapareció, sin embargo, su madre asegura que la pequeña huyó del maltrato que le daba su progenitor.

Pero esta no es la única historia, Janeth se fue de su hogar a los 10 años porque su padrastro la golpeaba, viajó hasta el Oriente y regresó a los 22 años cuando ya había formado su propia familia.

Para ella esto no es lo único difícil pues su hermana hizo lo mismo a los 9 años y ahora ya tiene 14, lo último que supo de ella es que vive en Quito, pero no la ha visto.

Como estos son decenas de casos que se registran en la Dirección Nacional de Policía Especializada para Niños, Niñas y Adolescentes (Dinapen), como se dio a conocer desde el Departamento de Investigación de esta entidad.

Aunque no hay un dato estadístico de menores que desaparecen de sus casas por maltrato, las denuncias que llegan hasta el Consejo Cantonal para la Protección de Derechos de Ambato, son por diferentes causas de abuso contra el menor, así lo manifestó su director Kléver Peñaherrera.

 

TOMA NOTA
Medidas de protección para un menor maltratado

 

La violencia va en aumento

Para el psicólogo infantil Alex Guerra el maltrato físico, sexual o psicológico, y a veces todos juntos, que reciben en su casa hacen que el niño tome diferentes formas de escapar de su agresor.

“La reacción a esta acción depende de la personalidad del menor pues no todos tienen, a edades cortas, la supuesta valentía de salir de sus casas y enfrentarse a un mundo desconocido, sin embargo, quienes sí lo hacen están expuestos a los mismos peligros de los que huyeron si caen en manos peligrosas”, explicó Guerra.

Para el especialista, los niños que huyen de las casas están en igual vulnerabilidad que en manos de su maltratador, por eso el Estado debe garantizar la protección de los pequeños, pero el seguimiento de violencia en contra de los infantes, en muchas ocasiones no se hace efectivo.

Otro de los factores para que esto quede en la impunidad, según Guerra, es que no todos lo denuncian y el maltrato a los menores continúa hasta que escapan o toman inclusive decisiones más dolorosas como quitarse la vida.

 

Amonestación a los padres o círculo cercano

  • Boleta de Auxilio
  • Orden de Alejamiento
  • Botón de pánico
  • Custodia Temporal
  • Institucionalización de niños y niñas (casa hogar)

 

Análisis

Grace Vásquez, socióloga directora técnica del Consejo Nacional para la Igualdad Intergeneracional, habla sobre los niveles de violencia que se viven en Ecuador y que nacen a veces en el seno familiar pese a que este es un espacio donde los niños deben estar protegidos.

“Si el menor es víctima de violencia en su hogar el Estado debe actuar con atención sicológica para él y su entorno familiar y así evaluar si el entorno vulnera sus derechos para para tomar las medidas de protección o puede rescatarse el núcleo más cercano como tíos abuelos”, dijo Vásquez.

La especialista recomienda creerle al niño pues solo así se pueden tomar acciones para que quede a buen resguardo que, como última medida tiene llegar a una casa de acogimiento si se han agotado todos los procesos para garantizar su resguardo.

Otro de los factores que hay que evaluar es el entorno en el que se desarrolla el menor cuando no necesariamente es golpeado, pero sufre violencia psicológica cuando su madre es agredida o hay malos tratos lo que lo empuja a huir de su casa.

“El tema no es simple, pero deben tomarse medidas realmente efectivas para garantizar el buen desarrollo de nuestros niños y adolescentes”, finalizó la socióloga. (CNS)

 

Denunciar es una obligación

En el país se establece que, si una persona es testigo de maltrato, de cualquier tipo, hacia un menor debe hacer la respectiva denuncia.

Se indica que: “toda persona que conozca de un caso de vulneración de derechos (físico, psicológico, sexual), tiene la obligación de poner en conocimiento a la autoridad competente (Juntas Cantonales de Protección de Derechos, Tenencias Políticas, Jefaturas Políticas, etc.)”, según el Código de la Niñez y Adolescencia, Art. 17