Mercedes Santana: ‘La crianza de los hijos es una tarea en conjunto’

La dulzura de Mercedes Santana es una de las cosas que le ha permitido enfrentar de buena manera el inmenso reto de ser madre.
Actitud. La dulzura de Mercedes Santana es una de las cosas que le ha permitido enfrentar de buena manera el inmenso reto de ser madre.

Las barreras de la actitud de los demás hacia ella, es una de las cosas más complicadas que se le ha cruzado a Mercedes Santana, quien tiene discapacidad física y desde hace 41 años se moviliza en silla de ruedas.

Si bien su realidad es diferente a la del común de las personas, hace 29 años cuando quedó embarazada de su primer hijo, que ahora tiene 28 años, hubo quienes se cuestionaron cómo iba a lograr culminar su periodo de gestación y luego cómo iba a cuidar de su pequeño, sin embargo, ella supo afrontar con fortaleza y valentía su decisión de ser madre.

“Hasta se me presentaron las barreras médicas, pues en esa época no se sabía cómo tratar a una mujer con discapacidad embarazada, pero con los cuidados necesarios he tenido dos veces la maravillosa bendición de ser madre”, cuenta con una dulce y tímida voz.

Mercedes es promotora laboral del Servicio de Integración Laboral para Personas con Discapacidad y como todas las madres ha aprendido a engranar su tiempo con el cuidado de sus hijos, el hogar y el trabajo.

“La crianza de los hijos es una tarea en conjunto y yo he contado con la inmensa bendición de tener a mi esposo para esa labor, así como la de mis familiares, pues el formar seres humanos, no debe ser tarea solo de la madre, sino de la sociedad en general y por eso tenemos que aprender a darnos la mano entre todos», puntualizó.

TOME NOTA 
Mercedes Santana tiene 63 años y 41 de ellos ha vivido con discapacidad física.

Determinación

Mercedes es una de las mujeres convencidas de que “para las madres la palabra no puedo es casi inexistente, pues siempre encontramos la forma de hacer las cosas posibles y de cuidar lo mejor que podemos a nuestros hijos”, señala mientras recuerda que ese ha sido constante pensamiento en la difícil y sacrificada tarea de ser madre.

Sin embargo, cuenta que todo esfuerzo vale la pena cuando ve a sus hijos, ahora de 28 y 26 años, listos para seguir enfrentado a la vida con determinación y los valores aprendidos en el hogar.

Mercedes está convencida de que el amor, el diálogo, la comprensión y el respeto son cualidades que deben transmitirse dentro del hogar, pues los hijos aprenden con el ejemplo y con eso tendrán las herramientas necesarias para ayudar a construir sociedades más justas, respetuosas y equitativas.

“Yo no puedo más que estar agradecida con la vida y con el Creador por la maravillosa oportunidad que me dieron de crecer junto a mis hijos y de transmitir y sentir este amor incondicional”, finalizó Mercedes.

“Los hijos aprenden con el ejemplo y si queremos que sean honestos, dedicados, éticos y amorosos, debemos tratarlos y tratarnos así en el hogar”.

Mercedes Santana
Promotora laboral del Servicio de Integración Laboral para Personas con Discapacidad