Asesorar a sus socios y clientes para que alcancen sus sueños, es el plus que la Cooperativa de Ahorro y Crédito Credil les ofrece a los microempresarios de subsistencia y comerciantes que buscan mejorar sus condiciones de trabajo y de vida.
Vinicio Marcelo Lagua, gerente general de la institución financiera, explicó que ellos forman parte de la economía popular y solidaria, lo que les permite atender a las personas de la base, “a las personas de a pie, quienes necesitan que se crea en ellas para poder surgir y sacar a flote sus familias”.
La clave del trabajo
Para conseguir esos objetivos, Credil ha trabajado en un proceso de educación financiera, que le permita a sus socios y clientes entender que no hay que endeudarse por endeudarse y que se puede hacer un banco de ahorro para mejorar cada vez más las condiciones de trabajo.
“Nosotros les explicamos las proyecciones de su negocio y cuál es la mejor manera de invertir el crédito que vayan a hacer”, mencionó Lagua.
Añadió que dentro de este proceso de orientación, también se les explica la importancia de hacer un banco de ahorro para cuando se tenga la necesidad de mejorar su negocio puedan hacer un nuevo crédito, pero únicamente de lo que les falte para su proyección, pues ya cuentan con un capital previamente ahorrado.
“Además, su importancia es porque, este dinero reservado, también puede servir para afrontar tiempos de crisis y no puedan caer en morosidad y así no sientan que una deuda los está ahogando”, mencionó el Gerente General.
Lagua comentó que el asesoramiento no queda únicamente en qué se puede invertir, si no en marketing, ventas, talento humano y así los comerciantes y microempresarios enfoquen de mejor manera su estrategia de trabajo y que este genere el sustento requerido.
Visión ambiental
Otro de los puntos que Lagua resalta, es que Credil está interesada en el cuidado ambiental, por lo que todos los créditos que se entregan, a segmentos que tengan que ver con este tema, deben contar con la documentación que avale su trabajo.
“Por ejemplo si un fabricante de jeans, maderero o una microempresa de ese tipo requiere de un crédito, debe tener los permisos ambientales en regla para poder analizar su carpeta, de lo contrario simplemente el proceso no avanza”, dijo Lagua.
Esto pues en Credil están conscientes de que las nuevas generaciones deben contar con un ambiente seguro para crecer y desarrollarse.