Alrededor de 15 mil dólares es la deuda que tiene que pagar Maribel Freire, una de las comerciantes de la Terminal Sur de Ambato, ella asegura que las ventas apenas si sirven para sobrevivir con 5 dólares al día.
Como ella, los pocos comerciantes que continúan en la Terminal Sur luchan por no sucumbir ante la falta de clientes.
“No queremos ir a engrosar las filas de la informalidad, nos resistimos a abandonar nuestros puestos de trabajo, pero las deudas siguen subiendo y no hay ventas ni viajeros”, comentó.
A decir de la ciudadana desde 2020 que iniciaron las actividades, los rubros por concepto de arriendo de los locales no se logran cubrir debido a que no existe afluencia de personas a esta infraestructura gigantesca.
Apenas cuatro locales quedan abiertos en la zona de comidas de la Terminal, por ello Pablo Llerena, uno de los adjudicatarios aseguró que, aunque no existe competencia, no se vende nada puesto que no hay a quien vender.
“Son contados los clientes que de vez en cuando pasan por aquí”, comentó al asegurar que también adeuda más de 15 mil dólares a la municipalidad.
A decir de los comerciantes, se tenía la esperanza de que su trabajo sea bueno luego de la inauguración de la Terminal, pues desde el Municipio de Ambato se ‘vendió’ la idea de que estaba todo planificado para que este espacio sea funcional.
“Incluso mis cuentas han sido bloqueadas por las deudas que no se logran pagar, pues nos dicen que ya tenemos juicios de coactivas y no se puede pagar ni el impuesto a los predios si no se encuentra al día con estas deudas de los locales de la Terminal Sur”, explicó otra comerciante.
EL DATO La Unidad de Terminales Terrestres está en proceso de desconcentración, por lo cual aún no se ha iniciado con ningún trámite de adjudicación de locales comerciales en el Terminal Terrestre Sur.
Pedidos
A decir de los comerciantes ni siquiera en medio de la pandemia se condonó o rebajó el costo de los locales comerciales por ello subieron exorbitantemente las deudas.
Entre los pedidos que realizan los desesperados comerciantes es que se cuente con una reforma a la Ordenanza de Funcionamiento de la Terminal para que allí se estipule un precio de arrendamiento que sea acorde a la realidad y a la afluencia de personas que llegan a este sitio.
“Se ofreció a que se iba a bajar al 50%, pero en el Municipio y entre los concejales solo nos dan largas y no soluciones”, aseguró Miriam de Jesús, presidenta de los comerciantes.
TOME NOTA A 15 mil dólares ascienden las deudas de varios de los comerciantes que tienen sus puestos en la Terminal Terrestre Sur.
Autoridades
Se intentó obtener una entrevista sobre este tema con el Administrador de Terminales de la Municipalidad de Ambato, pero indicó que es un tema que debe tratarse con otra entidad y que se debe solicitar información al Departamento de Comunicación.
Desde la dirección de Comunicación se indicó, por medio de un comunicado, que la Unidad de Terminales Terrestres está en proceso de desconcentración, por lo cual aún no se ha iniciado con ningún trámite de adjudicación de locales comerciales en el Terminal Terrestre Sur, respetando el debido proceso.
“Se llamará a una licitación pública para la adjudicación de los espacios, conforme lo dicta la normativa”, se explicó.
En mayo de 2021, la administración de la Unidad de Terminales envió al Concejo Municipal el proyecto de reforma a la Ordenanza que regula el funcionamiento de las terminales, con la propuesta de reducción de los cánones de arrendamiento, hasta el momento está aprobada en primer debate y en segundo debate no pasó debido a que los concejales solicitaron un nuevo informe jurídico.
“Se ha dialogado con los señores arrendatarios para que conozcan que la municipalidad cuenta con acuerdos de pago, a fin de cancelar los valores pendientes”, se explicó. (FCT)
Qué es un juicio de coactiva
Los juicios de coactiva son procesos de corta duración que permiten cobrar las deudas, fundamentalmente de la cartera vencida de los bancos, en un plazo menor a un mes y no mayor a tres meses.
La acción coactiva no tiene determinado expresamente un tiempo de prescripción, por lo que, por ser un proceso de ejecución, se aplica lo dispuesto en el artículo 2415 del Código Civil que establece un plazo de cinco años para la prescripción de las acciones ejecutivas.