Cómo evitar el dolor de espalda que produce el trabajo

Los dolores de espalda pueden ser consecuencia de malos hábitos.
Espalda. Los dolores de espalda pueden ser consecuencia de malos hábitos.

Ya sea que el dolor de espalda sea fijo y constante o agudo y punzante, puede hacer que te sea difícil concentrarte en el trabajo.

Lamentablemente, muchas ocupaciones pueden exigir mucho la espalda. Incluso el trabajo de oficina diario puede causar dolor de espalda o empeorarlo.

 

Causas frecuentes de dolor de espalda en el trabajo

Fuerza. Ejercer demasiada fuerza en la espalda, por ejemplo, al levantar o mover objetos pesados, puede causar lesiones.

Repetición. La repetición de ciertos movimientos, especialmente aquellos que involucran torcer o rotar la columna vertebral, puede lesionar la espalda.

Inactividad. Un trabajo inactivo o un trabajo de escritorio pueden contribuir al dolor de espalda, especialmente si tienes una mala postura o te sientas todo el día en una silla con un apoyo inadecuado para la espalda.

Cómo prevenir el dolor de espalda en el trabajo

Puedes tomar medidas para evitar y prevenir el dolor de espalda y las lesiones en el trabajo. Por ejemplo:

Presta atención a la postura. Cuando estés de pie, equilibra el peso de manera equitativa en los pies. No te encorves. Para promover una buena postura al sentarte, elige una silla que brinde soporte a la región lumbar.

Ajusta la altura de tu silla de manera que los pies descansen planos sobre el piso o sobre un reposapiés y tus muslos estén paralelos al piso.

Retira la billetera o el teléfono celular del bolsillo trasero cuando estés sentado para no ejercer más presión en los glúteos o en la parte inferior de la espalda.

Levanta peso de manera adecuada. Cuando levantes y cargues un objeto pesado, procura que este esté cerca del cuerpo, flexiona las rodillas y contrae los músculos del estómago.

Usa los músculos de las piernas para sostener el cuerpo mientras estás de pie. Sostén el objeto cerca del cuerpo. Mantén la curva natural de la espalda.

No tuerzas el cuerpo al levantar objetos. Si un objeto es demasiado pesado para levantarlo sin peligro, pídele ayuda a alguien.

Modifica las tareas repetitivas. Usa dispositivos de elevación, cuando estén disponibles, como ayuda para levantar cargas.

Trata de alternar las tareas físicamente exigentes con las menos exigentes. Si trabajas frente a una computadora, asegúrate de que el monitor, el teclado, el mouse y la silla estén en la posición correcta.

Si hablas por teléfono con frecuencia y escribes o tipeas al mismo tiempo, coloca el teléfono en altavoz o usa auriculares con micrófono.

Evita doblarte, torcerte y extenderte innecesariamente. Limita el tiempo que pasas cargando maletines, carteras y bolsos pesados.

Escucha a tu cuerpo. Si debes permanecer sentado durante un período prolongado, cambia de posición con frecuencia. Camina de a ratos y estira los músculos con suavidad para aliviar la tensión. (RMC)