Alarmas comunitarias dejan de funcionar en varios barrios

Los moradores dicen que no pueden asumir con los gastos de reinstalación de las alarmas por ser costosas.
SEGURIDAD. NexMedios se queda con el contrato de las alarmas comunitarias.

Los moradores de barrios como La Floreana, Miraflores, La Castellana y Ficoa, piden a las autoridades que se les habiliten nuevamente las cámaras de seguridad que quedaron inhabilitadas luego del soterramiento de cables que se realizó en sus sectores.

Mario Hidalgo, es uno de los representantes barriales que pide al Municipio de Ambato la reinstalación de las alarmas comunitarias, pues estas ayudaban a alrededor de 100 familias en el sector de La Castellana.

Mediante una reunión, realizada el jueves 3 de mayo de 2022, con otros dirigentes barriales se presentó una solicitud para pedir que se hagan responsables de la habilitación de las alarmas, pues la inseguridad al momento ha regresado a sus barrios.

 

Historias

Alberto Garcés vive en Ficoa desde hace 40 años y dice que al quedarse sin la alarma comunitaria hace unos seis meses, han tenido que improvisar los llamados de auxilio, con pitos, gritos o el chat de barrio en caso de una emergencia.

Esto sobre todo porque en su barrio hay problemas con libadores, peleas, o robos en las casas y es necesario tener herramientas de seguridad para protegerse.

Carlos Espejo, habitante de la calle Olmedo desde hace 70 años, dice que luego de contar con una alarma por más de seis años, ahora solo tienen una infraestructura ‘muerta’ porque ya no cuentan ni con las cámaras de videovigilancia que registraban los hechos delictivos en la zona.

Para Espejo esto se ha convertido en una ‘bomba de tiempo’, porque ya empezaron los robos a todas horas y llamar a líneas de auxilio como el ECU 911, es demorado, recalcó.

 

EL DATO
Las alarmas comunitarias son instrumentos disuasivos para 
prevenir delitos y otros eventos de emergencia que solo 
funcionan con la participación de los moradores en 
coordinación con los organismos de socorro.

Nadie se hace responsable de la reconexión

Dentro de los mismos pedidos hechos por los diferentes barrios, a la Empresa Eléctrica de Ambato, pues son los que hicieron los trabajos de soterramientos o a su vez al Consejo Municipal de Seguridad Ciudadana de Ambato (Comseca).

Jaime Astudillo, gerente de Eeasa manifestó que no es responsabilidad de la empresa la reposición de los equipos, sin embargo, aclaró que dentro de los trabajos se dejaron abiertas las entradas para la respectiva conexión y en el caso de necesitar asistencia técnica podrán contar con la ayuda del personal de la institución.

 

TOME NOTA
Los equipos cambian de lugar cada seis meses según la necesidad del 
ector, por lo que los moradores pueden solicitarlo de manera directa 
en el Municipio del cantón.

 

Mientras que, con un comunicado, Comseca dijo que no se puede reinvertir en un proyecto que ya se ejecutó, por lo que la responsabilidad del uso y mantenimiento de los equipos recae sobre los mismos moradores de los barrios, urbanos y rurales de Ambato, donde se instaló el sistema de alarmas comunitarias.

El comunicado añade que dentro de su trabajo está socializar el correcto funcionamiento de la alarma, entre ellos, recargar el chip cada mes, probarla cada cierto tiempo y sonar las sirenas con sus altavoces.

Sin embargo, una vez entregados mediante un acta el Municipio, se deslinda de responsabilidades de reposición y solo se responsabiliza del mantenimiento de los mismos.

Según datos de Comseca, el costo de las alarmas es de 3 mil dólares, pero que ese valor disminuye según el tamaño del barrio o ciudadela.

De este valor, la Municipalidad aporta con mil 500 dólares y los habitantes el resto.

Mientras esto se resuelve, los moradores dijeron no poder asumir con los gastos que implica la reinstalación de estos equipos por lo que dicen insistirán en ser atendidos. (CNS)

 

Cómo acceder a una alarma comunitaria

El barrio que quiera este beneficio debe estar legalmente organizado, efectuar una solicitud a la municipalidad, luego de realizar una inspección que permite determinar los costos y finalmente se instalan los equipos.