Otavalo, La Hora
Las parcelas de la comunidad Gualapuro, ubicada al noroccidente de la urbe otavale, lucen diferentes. Hace cuatro meses el ma y frol dejaron de ser los icos alimentos de cultivo. Ahora, seis familias de la localidad se dedican a la producci de hortalizas.
Las lechugas, coles, acelga, remolacha, zanahoria, coliflor, broli, entre otros productos que crecen en un amplio huerto, son una muestra de la nueva actividad. Alllabora Trsito Mor, junto a un grupo de comuneros que integra la Corporaci de Producci Agrola y Comercializaci Imbaya (Corpaci).
«Trabajamos los martes, de 07h00 a 12h00. Un comparo nos prestel terreno por un a; aqutodos colaboramos y nos turnamos para regar agua o para deshierbar el huerto; esperamos que luego de unos meses podamos arrendar otro terreno para ampliar los cultivos», explica Trsito, mientras extrae de la tierra varias lechugas que est en cosecha.
A pocos metros de esa parcela, cientos de racimos de mora enrojecen en un terreno de media hectea. Es el ea de otro grupo de trabajo liderado por Juli Muenala. invirtiUSD 15 mil para adecuar la plantaci, instalar el cerramiento y construir un reservorio de agua que le servirpara el riego.
Juli, al igual que el resto de familias, espera que el nuevo mercado Imbaya, que funcionaren la ciudadela del mismo nombre, en la urbe otavale, se abra cuanto antes, para poder comercializar los productos que se cultivan en los huertos grupales o familiares.
Proyecto de comercializaci
La Corpaci se conformcon la finalidad de agrupar a asociaciones de productores de varias comunidades del cant, para la implementaci de huertos en los que se cultiven frutales, hortalizas, granos y para la crianza de animales menores. Esa organizaci cuenta con el apoyo de la oficina cantonal del Ministerio de Agricultura y Ganader (MAG), Municipio y la Corporaci Imbabura.
Ra Cdenas, tnico del MAG, informque el proceso de coordinaci con los productores agropecuarios inicihace dos as, pero la parte operativa se desarrolla hace cuatro meses. Adique la Corpaci esten proceso de legalizaci y agrupa a 11 asociaciones de las comunidades Cambug, Inguincho, Ugshaloma, La Rinconada, Azama y Gualapuro.
Los tnicos del MAG apoyan con el asesoramiento para el manejo de los cultivos y la crianza de animales menores. Ra Cdenas, por ejemplo, labora con los grupos comunitarios de Azama. «Utilizamos materiales del medio para los cerramientos de los huertos; los abonos son orgicos y hacemos controles fitosanitarios con extractos vegetales, para evitar plagas y enfermedades. La idea es llevar alimentos sanos e higiicamente tratados al nuevo mercado».
Actualmente, los agricultores acceden a semillas donadas por la Corporaci Imbabura. Esa entidad tambi entrega mangueras, utilizadas para el riego, pues no existen sistemas hricos que se puedan utilizar para el uso exclusivo en las parcelas.
El Municipio, por su parte, apoya con el combustible para el vehulo del MAG y con aportes econicos que sirven para el desarrollo de las actividades de asesoramiento tnico. La entidad, adem, invirtipara la construcci del mercado Imbaya que se previnaugurar en pocos ds.
Para el abastecimiento del mercado, los miembros de la Corpaci se organizaron en cuatro grupos, seg el tipo de producto, para la venta de leche y sus derivados, hortalizas, granos secos, harinas y animales menores, como cuyes y pollos.
Ellos est esperanzados en que las ventas les permitan ampliar la producci. El principal objetivo es que los alimentos se comercialicen en forma directa, sin intermediarios.
Esa es la principal aspiraci de Trsito Mor y los 84 productores que integran la Corpaci. «Nos conviene comercializar directamente, porque los revendedores se aprovechan de nuestro trabajo», afirma la agricultora.
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Oportunidades de empleo
> El nuevo mercado Imbaya se abastecer exclusivamente, con los productos de la Corpaci. Los vendedores tambi ser de las comunidades.
> No habrintermediaci para la venta de los productos. Los mismos ir de los huertos al mercado, previo el debido tratamiento higiico. Alrededor de cuatro hecteas se utilizan para los cultivos familiares y grupales.
El propito del proyecto es crear un nuevo polo de desarrollo econico, mediante el aprovechamiento de las parcelas y la generaci de empleo en las comunidades.