Ayer se realizla inauguraci de la muestra de Consuelo Holgu Pez: un delicioso repertorio pictico, que recoge el ambiente de la fiesta taurina; pero no en la tradicional atmfera del pase atrevido, o el arrastre del «bicho», sino que logra convocar el espitu del festejo posterior, en el cual el toro deja de ser el enemigo y, por el contrario se torna en el comparo de farra de matadores, fanicos, e incluso del ciudadano ajeno al «coso». El toro se mete en el andar cotidiano, la fiesta se vuelve cotidiana.
Una temica ideal, para el escenario festivo en que la ciudad va entrando, en el contexto de su aniversario.
