Mico, (EFE)
«Buena Vista Social Club» lo hizo masivo, Michael Moore lo lleval terreno polico y el chileno Patricio Guzm recorre Europa gracias a para mostrar la vida del ex presidente Salvador Allende: se trata del documental, el gero que ha ganado m adeptos.
En los timos cinco as los documentales han acaparado premios en los principales festivales de cine con una nueva y polica manera de observar la realidad.
Si hasta hace poco as fue el pariente pobre de la cinematograf, por su escaso presupuesto y la dificultad de encontrar financiaci, hoy el documental vive su momento de gloria, con nuevas formas de contar las historias y avivar la curiosidad del plico.
«El documental es una forma cinematogrica distinta que hoy d estde moda y espero que no pase», dijo a EFE el cineasta Patricio Guzm.
Aunque afirmque no todos los documentalistas tienen que protagonizar sus cintas, Guzm destaca que el cine «provocador» de Michael Moore (Bowling for Columbine y Farenheit 9/11) «tiene gran valor» en un continente «donde no hay crica».
Sobre el documental de los octogenarios micos cubanos «Buena Vista Social Club», de alem Wim Wenders, Guzm es menos complaciente y, aunque agradece que haya abierto este gero al gusto popular, considerque es «facil».
«Si haces la historia de la trova, que son unos viejos encantadores que cantan, llevas mucho por delante para tener un gran plico», sel