A finales de abril y comienzos de mayo inicia el retorno de las aves migratorias a su lugar de origen, en el norte del continente americano, después de pasar varios meses fuera de este huyendo del invierno boreal y de la falta de alimento, mientras que desde marzo/abril hasta octubre comienza la migración de aves australes provenientes del sur del continente.
El proceso de los migratorios boreales, como se conoce el movimiento de las aves que vienen sobre todo de Estados Unidos y Canadá, inicia en septiembre y termina a finales de abril, meses en los cuales en esas naciones se presenta la época invernal boreal con muy bajas temperaturas.
Sandy Espinoza, conocedora de aves, informa que ese transcurso migratorio hace que algunas especies lleguen a la Sierra, otras vayan hacia la Costa y otras tantas están solo estén de paso en dirección a los países del sur.
Las que llegan a Ecuador
De acuerdo con birdsinecuador.com, al país vienen 122 especies de aves migratorias boreales que se dirigen desde Norteamérica (incluyendo Centro América, desde México hasta Panamá) y que se ubican en zonas por debajo de los 1.500 m.
En cuanto a las aves migratorias australes, que llegan del hemisferio septentrional (sur del continente), se han registrado la presencia de por lo menos 20 especies que, entre marzo y junio, visitan la Amazonía ecuatoriana.
De igual forma, se registra la presencia de seis especies de aves migratorias intratropicales, las cuales se reproducen dentro de los trópicos y migran a alguna otra región tropical para permanecer durante la etapa no reproductiva.
Asimismo, se ha registrado 30 visitantes pelágicos (que viven en zonas alejadas de la costa) a lo largo de la costa del Pacífico ecuatoriano.
¿Por qué se desplazan?
La migración es una conducta instintiva. Las aves, al igual que otros animales, poseen dos ‘relojes biológicos’ que determinan complejas funciones diarias y anuales, respectivamente. El reloj biológico diario responde a los ciclos diarios de luz y temperatura. El reloj anual actúa sobre el sistema hormonal y les anuncia, por ejemplo, el momento indicado para mudar plumaje, migrar y reproducirse. Estos mecanismos hacen que se den los cambios fisiológicos necesarios que las prepara para migrar en el momento indicado.
Algunas viajan en la noche, otras lo hacen solo de día porque dependen de las corrientes de aire caliente o termales para trasladarse. Y hay algunas que viajan sin parar o haciendo muy pocos descansos hasta llegar a su destino.
Pero el cambio climático ha causado ciertas modificaciones en el comportamiento de las aves migratorias, señala Espinoza: en Europa ciertas especies ya no completan su proceso migratorio y se quedan en ciertos sitios, mientras que en América del Sur se ha registrado la presencia de nuevas especies en sitios y ciudades a donde antes no llegaban. (CM)
Conocimiento
Amenazas
° La caza, la captura y el comercio ilegales son un peligro para la existencia de las aves migratorias.
° Las actividades ilegales terminan con poblaciones de aves, dañan a la sociedad y afectan a los recursos naturales.
