Libertad de expresión

Rocío Silva

La organización de la sociedad civil Fundación Andina para la Observación y Estudio de Medios (Fundamedios), cuya tarea principal es el apoyo a medios de comunicación y periodistas a través de su red de monitoreo de amenazas a la libertad de expresión, ha denunciado que las autoridades municipales de Ambato profirieron un trato hostil a periodistas.

Esta situación no puede pasarse por alto, algo no está funcionando como debe funcionar, cuando al periodista Villa Álvarez, corresponsal de Ecuavisa en Ambato, se lo ha agredido físicamente el 10 de febrero de 2018, en el cumplimiento de su trabajo, al realizar una entrevista a la Srta. Soberana de Ambato.

Los verdaderos ambateños nos caracterizamos por ser cordiales, somos herederos de quienes hicieron de su palabra el bastión de lucha social, como es caso de nuestro Juan Montalvo, y no es posible que un servidor público amparado en un falso poder, maltrate a periodistas, hay un abuso de la autoridad, hay un equívoco sentido de pertenencia. La reina de Ambato, tiene la decisión de dar entrevistas cuando ella lo desee, no tiene que pedir autorización a ninguna autoridad civil, eclesiástica, militar, pues ella es nuestra autoridad simbólica, y representa por mérito una figura política enriquecida en su propia ideología y palabra.

En este sentido, si bien repudiamos el acto de violencia contra el periodista en mención, con mayor fuerza repudiamos el intento de cosificación y subordinación a nuestra soberana por parte de funcionarios de medio pelo, que por lo visto, no entienden su posición como servidores públicos, cuyos sueldos salen de nuestros impuestos.

En similitud de circunstancia el 16 de febrero, un periodista radial ha sido cuestionado y amenazado por el Alcalde, ante una pregunta de dominio público, que al no ser resuelta por el burgomaestre da pie, a todas las conjeturas posibles en redes sociales. Nos permitimos recordar al Alcalde de marras, que una pregunta periodística no es bien o mal intencionada; la inteligencia y veracidad con que se responda a la misma, otorgarán el sentido de libertad de expresión, por el que hemos luchado en los últimos años en el país.