Mágica infraestructura

En el chuchaqui de la pandemia y la fiebre electoral, se promete encender el engranaje del empleo y el consumo con millonarias inversiones en infraestructura. Es lógico. El FMI estima que un incremento de la inversión del 1% del PIB, crearía entre 20 y 30 millones de empleos a nivel mundial.

La frágil situación del país exige precisión quirúrgica para evitar que el costo del endeudamiento no se ‘coma’ el beneficio económico de la obra pública. La Universidad en Oxford señala que más de la mitad de proyectos en economías emergentes son “destructivos” en lo financiero.

“La infraestructura es una de las pocas industrias locales en las que aún ‘rinde’ copiar el ejemplo de otros países”, asegura el diario británico The Economist.

Países como Chile y Noruega tienen una sola ‘lista’ de proyectos en base al retorno que pueden generar, y el ente que los ejecuta (comúnmente privado) tiende a ser independiente del que los contrata y los manejará en el futuro, aunque esto implique olvidarse de obras pomposas con letrero del cacique de turno.

En Ecuador, la nefasta experiencia de la corrupción canalizó 3 mil millones de dólares, en nueve años, a la Secretaría de Contratación de Obras (Secob) que gestó Correa desde 2011, bajo el lema de que en manos ‘técnicas’, se evitarían sobornos, sobreprecios e ineficiencias.

Pronto la Asamblea tendrá que tratar las reformas a la Ley Orgánica de Contratación Pública. El reto está en promulgar una ley que logre los necesarios avances en infraestructura pensados en el mundo del mañana, y no en los ladrones del ayer.

El silencio nunca es aceptable cuando se enfrenta a la ilegalidad.

Richard Blumenthal (1947- ) Político y senador estadounidense.

Su último lamento pedía que no la maten; es un símbolo de lo poco a lo que aspiramos las mujeres.”

Gulsum Kav (1971- ) Doctora y activista turca.