El 28 de junio pasado se conmemoró el 51 aniversario de un hito histórico para las comunidades GLBTI del mundo. Este episodio ocurrido el 28 de junio de 1969, en el Bar Stonewall, del Barrio Greenwich Village en Nueva York, sucedió cuando una habitual redada policial desembocó en enfrentamientos entre los agentes y los clientes del bar, cuando estos últimos se resistieron a ser arrestados, cansados de la violencia y abuso policial.
Este hecho desembocó en una movilización colectiva de las comunidades GLBTI, quienes para el año siguiente en 1970, para conmemorar la rebelión, realizaron la primera marcha del Orgullo GLBTI en Central Park. La organización y reconocimiento colectivo de la desigualdad de estos grupos históricamente excluidos, surgió a raíz de esta acción de resistencia, iniciando un movimiento mundial por la reivindicación de sus derechos.
Para aquella época y mucho antes, las personas GLBTI no podían afirmar libremente su orientación sexual o identidad de género, a riesgo de perder familia, trabajo, vivienda, etc., y aunque si bien hasta hoy persisten en muchos países prácticas culturales, leyes y normativas que criminalizan a las personas sexualmente diversas, se ha experimentado avances significativos. En el Ecuador a partir de 1997 se logró la despenalización de la homosexualidad y el 12 de junio de 2019, la Corte Constitucional en un fallo histórico, aprobó el matrimonio igualitario
El significado del concepto “Orgullo GLBTI”, reside en que ningún ser humano debe avergonzarse de lo que es, sea cual sea su sexo biológico, orientación sexual o identidad de género y surge como una respuesta política interpelante, hacia los mecanismos que el sistema tradicionalista y conservador continúa activando aún hoy en día, contra quienes se “desvían” de la heteronormatividad, colocándolos en riesgo de sufrir discriminación, exclusión y violencia, que pueden llegar incluso hasta la muerte.