Tráfico caótico por arreglo de calles y pocas rutas de evacuación en el centro de Santo Domingo

Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.
Consecuencia. Los vehículos que circulan por avenida Quito no podrán girar por la Tulcán hasta fin de mes.

El sonido de las cornetas es muestra de la desesperación que tienen los conductores cuando transitan por la avenida Quito. Sobre todo en el trayecto de la Ibarra hasta la Cocaniguas, sector conocido como las Cinco Esquinas.

Hace varias semanas se satura el tráfico en este sector. Sin embargo; el problema se agravó desde el pasado lunes por el cierre de la calle Tulcán, la misma que está siendo intervenida desde la Quito hasta la Galápagos.

Ahora los carros no tienen opción de girar a la izquierda ni a la derecha, situación que los obliga a avanzar más cuadras para circunvalar. El paso de los buses congestiona más el flujo vehicular, cuyos conductores se desesperan porque se pasan los minutos permitidos para cubrir la ruta.

“Nos perjudica mucho, principalmente los días que vamos a la terminal terrestre porque obligatoriamente debemos avanzar hasta las cinco esquinas para virar”; manifestó Cristhian Guerrero, quien labora en un micro de la transportación urbana.

El taxímetro es otro de los aspectos que da ‘miedo’ a las personas que se movilizan en las unidades pertenecientes al gremio amarillo, pues las largas filas repercuten en la tarifa final. “Ahora resulta más caminar para pagar menos y llegar más rápido al trabajo”, expresó Jorge Zapata, quien labora por el parque Zaracay.

Las personas que conducen taxi también son afectadas por el tiempo que se demora al salir del centro. “Es complicado, pero al cliente hay que atenderlo. Realmente es complicado porque nos demoramos más de media hora en una carrera que no supera los dos dólares, ya que el usuario se baja del carro y nosotros quedamos atascados en el tráfico”, dijo Hermel Chasi.

Trabajos

César Terán, superintendente de la obra, dijo que son siete calles las que se van a asfaltar en el centro de Santo Domingo. Explicó que en la Tulcán han iniciado por la adecuación de las veredas, en las mismas que se colocarán adoquines con diseños especiales y se adaptarán elementos para la libre movilidad de las personas con discapacidad.

La inversión del proyecto oscila entre los 563 mil dólares y existe un plazo de 150 días para finalizarlo en su totalidad. “Estamos trabajando a buen ritmo, nos hemos encontrado con muchos problemas pero no paramos. Ojalá el clima no sea tan agresivo porque las lluvias siempre afectan”, expresó Terán. (JD)

DATO

La siguiente calle que se intervendrá será la Cocaniguas

El sonido de las cornetas es muestra de la desesperación que tienen los conductores cuando transitan por la avenida Quito. Sobre todo en el trayecto de la Ibarra hasta la Cocaniguas, sector conocido como las Cinco Esquinas.

Hace varias semanas se satura el tráfico en este sector. Sin embargo; el problema se agravó desde el pasado lunes por el cierre de la calle Tulcán, la misma que está siendo intervenida desde la Quito hasta la Galápagos.

Ahora los carros no tienen opción de girar a la izquierda ni a la derecha, situación que los obliga a avanzar más cuadras para circunvalar. El paso de los buses congestiona más el flujo vehicular, cuyos conductores se desesperan porque se pasan los minutos permitidos para cubrir la ruta.

“Nos perjudica mucho, principalmente los días que vamos a la terminal terrestre porque obligatoriamente debemos avanzar hasta las cinco esquinas para virar”; manifestó Cristhian Guerrero, quien labora en un micro de la transportación urbana.

El taxímetro es otro de los aspectos que da ‘miedo’ a las personas que se movilizan en las unidades pertenecientes al gremio amarillo, pues las largas filas repercuten en la tarifa final. “Ahora resulta más caminar para pagar menos y llegar más rápido al trabajo”, expresó Jorge Zapata, quien labora por el parque Zaracay.

Las personas que conducen taxi también son afectadas por el tiempo que se demora al salir del centro. “Es complicado, pero al cliente hay que atenderlo. Realmente es complicado porque nos demoramos más de media hora en una carrera que no supera los dos dólares, ya que el usuario se baja del carro y nosotros quedamos atascados en el tráfico”, dijo Hermel Chasi.

Trabajos

César Terán, superintendente de la obra, dijo que son siete calles las que se van a asfaltar en el centro de Santo Domingo. Explicó que en la Tulcán han iniciado por la adecuación de las veredas, en las mismas que se colocarán adoquines con diseños especiales y se adaptarán elementos para la libre movilidad de las personas con discapacidad.

La inversión del proyecto oscila entre los 563 mil dólares y existe un plazo de 150 días para finalizarlo en su totalidad. “Estamos trabajando a buen ritmo, nos hemos encontrado con muchos problemas pero no paramos. Ojalá el clima no sea tan agresivo porque las lluvias siempre afectan”, expresó Terán. (JD)

DATO

La siguiente calle que se intervendrá será la Cocaniguas

El sonido de las cornetas es muestra de la desesperación que tienen los conductores cuando transitan por la avenida Quito. Sobre todo en el trayecto de la Ibarra hasta la Cocaniguas, sector conocido como las Cinco Esquinas.

Hace varias semanas se satura el tráfico en este sector. Sin embargo; el problema se agravó desde el pasado lunes por el cierre de la calle Tulcán, la misma que está siendo intervenida desde la Quito hasta la Galápagos.

Ahora los carros no tienen opción de girar a la izquierda ni a la derecha, situación que los obliga a avanzar más cuadras para circunvalar. El paso de los buses congestiona más el flujo vehicular, cuyos conductores se desesperan porque se pasan los minutos permitidos para cubrir la ruta.

“Nos perjudica mucho, principalmente los días que vamos a la terminal terrestre porque obligatoriamente debemos avanzar hasta las cinco esquinas para virar”; manifestó Cristhian Guerrero, quien labora en un micro de la transportación urbana.

El taxímetro es otro de los aspectos que da ‘miedo’ a las personas que se movilizan en las unidades pertenecientes al gremio amarillo, pues las largas filas repercuten en la tarifa final. “Ahora resulta más caminar para pagar menos y llegar más rápido al trabajo”, expresó Jorge Zapata, quien labora por el parque Zaracay.

Las personas que conducen taxi también son afectadas por el tiempo que se demora al salir del centro. “Es complicado, pero al cliente hay que atenderlo. Realmente es complicado porque nos demoramos más de media hora en una carrera que no supera los dos dólares, ya que el usuario se baja del carro y nosotros quedamos atascados en el tráfico”, dijo Hermel Chasi.

Trabajos

César Terán, superintendente de la obra, dijo que son siete calles las que se van a asfaltar en el centro de Santo Domingo. Explicó que en la Tulcán han iniciado por la adecuación de las veredas, en las mismas que se colocarán adoquines con diseños especiales y se adaptarán elementos para la libre movilidad de las personas con discapacidad.

La inversión del proyecto oscila entre los 563 mil dólares y existe un plazo de 150 días para finalizarlo en su totalidad. “Estamos trabajando a buen ritmo, nos hemos encontrado con muchos problemas pero no paramos. Ojalá el clima no sea tan agresivo porque las lluvias siempre afectan”, expresó Terán. (JD)

DATO

La siguiente calle que se intervendrá será la Cocaniguas

El sonido de las cornetas es muestra de la desesperación que tienen los conductores cuando transitan por la avenida Quito. Sobre todo en el trayecto de la Ibarra hasta la Cocaniguas, sector conocido como las Cinco Esquinas.

Hace varias semanas se satura el tráfico en este sector. Sin embargo; el problema se agravó desde el pasado lunes por el cierre de la calle Tulcán, la misma que está siendo intervenida desde la Quito hasta la Galápagos.

Ahora los carros no tienen opción de girar a la izquierda ni a la derecha, situación que los obliga a avanzar más cuadras para circunvalar. El paso de los buses congestiona más el flujo vehicular, cuyos conductores se desesperan porque se pasan los minutos permitidos para cubrir la ruta.

“Nos perjudica mucho, principalmente los días que vamos a la terminal terrestre porque obligatoriamente debemos avanzar hasta las cinco esquinas para virar”; manifestó Cristhian Guerrero, quien labora en un micro de la transportación urbana.

El taxímetro es otro de los aspectos que da ‘miedo’ a las personas que se movilizan en las unidades pertenecientes al gremio amarillo, pues las largas filas repercuten en la tarifa final. “Ahora resulta más caminar para pagar menos y llegar más rápido al trabajo”, expresó Jorge Zapata, quien labora por el parque Zaracay.

Las personas que conducen taxi también son afectadas por el tiempo que se demora al salir del centro. “Es complicado, pero al cliente hay que atenderlo. Realmente es complicado porque nos demoramos más de media hora en una carrera que no supera los dos dólares, ya que el usuario se baja del carro y nosotros quedamos atascados en el tráfico”, dijo Hermel Chasi.

Trabajos

César Terán, superintendente de la obra, dijo que son siete calles las que se van a asfaltar en el centro de Santo Domingo. Explicó que en la Tulcán han iniciado por la adecuación de las veredas, en las mismas que se colocarán adoquines con diseños especiales y se adaptarán elementos para la libre movilidad de las personas con discapacidad.

La inversión del proyecto oscila entre los 563 mil dólares y existe un plazo de 150 días para finalizarlo en su totalidad. “Estamos trabajando a buen ritmo, nos hemos encontrado con muchos problemas pero no paramos. Ojalá el clima no sea tan agresivo porque las lluvias siempre afectan”, expresó Terán. (JD)

DATO

La siguiente calle que se intervendrá será la Cocaniguas