Hay que trabajar para motivar la lactancia materna en el país

ESPACIO. En la Semana de la Lactancia Materna, las mujeres reclaman respeto.
ESPACIO. En la Semana de la Lactancia Materna, las mujeres reclaman respeto.

Este alimento contiene las propiedades nutritivas que necesita el bebé para su crecimiento.

Solo el 40% de mujeres siguen alimentando con leche materna a sus hijos después de los tres meses de nacidos. El 60% restante utiliza sustitutos inadecuados, como la leche de fórmula, caldos, coladas, aguas aromáticas, entre otros.

Esta cifra arrojó la encuesta nacional de salud de 2012, explicó el pediatra Fernando Montaño. Por esa razón, pide que se siga trabajando en concientizar sobre el beneficio de este alimento, no solo a las mujeres, sino también a las familias, a las empresas públicas y privadas, y a las autoridades nacionales.

La falta de espacios adecuados para alimentar al bebé o extraer la leche, en sitios públicos como en los puestos de trabajo, las críticas a este proceso natural y la falta de educación, son algunos de los obstáculos que impiden que las madres den el seno, asegura Gabriela Salcedo, docente universitaria y madre de una niña de 1 año y 8 meses.

Montaño, quien es partidario de que la educación sobre la lactancia la den los profesionales de la salud a sus pacientes en consulta, convocó a la construcción de salas de lactancia adecuadas para que las mujeres se extraigan la leche y la guarden en un refrigerador hasta llegar a casa.

Este pedido está basando en lo que propone la Organización Mundial de la Salud (OMS), que las madres tengan un entorno laboral propicio que las proteja y apoye para seguir con este procedimiento.

La OMS asegura que la lactancia materna promueve una mejor salud tanto para las madres como para los niños.“Eso es cierto”, afirma el experto, porque tiene nutrientes y proteínas como las inmunoglobulinas, que actúan como anticuerpos que defienden el organismo del bebé.

Según la OMS, la lactancia materna disminuye el riesgo de que las madres padezcan cáncer de mama y ovario, diabetes de tipo 2 y enfermedades cardíacas. Podría evitar 20.000 muertes de mujeres por cáncer de mama y salvar más de 800.000 vidas de menores de 6 meses, por año.

Los beneficios para los infantes, apunta el especialista, se dan desde que están en el vientre, porque la madre le transmite anticuerpos (defensas) a través de la placenta.

Cuando el bebé nace, sus defensas se ven fortalecidas con las que tiene la leche materna, y así se evita, al máximo, la aparición de patologías comunes como infecciones respiratorias y del tracto digestivo, neumonías, gripes, entre otros.

“Una característica importante es que cuando una madre cursa un proceso gripal, a través de la leche le pasa al bebé anticuerpos contra ese virus y ayuda a que el niño no se enferme”, asegura Montaño.

Fundamental

La lactancia materna debe ser exclusiva desde una hora después del nacimiento hasta los 6 meses de vida del infante. Luego hay que agregar alimentos complementarios mientras se continúa amamantando hasta los 2 años o más, dice la OMS.

Si la lactancia va más allá de los dos años, “no hay ninguna contraindicación”, porque la madre produce leche con la proporción adecuada de nutrientes, dependiendo de la edad de los niños. Este alimento tiene las características ideales para cada etapa de la vida del niño, explica Montaño.

Lo importante es que si la lactancia se prolonga, se complemente la alimentación con verduras, legumbres, frutas, proteínas. (CM)

Recolección

° Después de los tres meses de maternidad, las mamás pueden recolectar su leche de forma manual o con asistentes eléctricos que se encuentran en el mercado.

El pediatra Fernando Montaño menciona que la leche recolectada se puede mantener en un lugar fresco o en refrigeración para ser consumida en las próximas 48 horas.

En congelación dura hasta tres meses. No debe ser calentada en baño María, ni en microondas para evitar que se pierdan las propiedades de defensa que tiene.

“Simplemente hay que quitarle el frío sumergiendo el biberón en un pozuelo con agua caliente o tibia”, recomienda.

El consumo puede ser a temperatura ambiente y es falso que la leche fría cause cólicos o diarreas a los infantes.