El sábado son 50 años de la llegada del hombre a la Luna

REAL. Buzz Aldrin parado sobre la superficie lunar junto a un instrumento de medición sísmica. A la derecha se encuentra el módulo lunar Eagle. (Foto: NASA)
REAL. Buzz Aldrin parado sobre la superficie lunar junto a un instrumento de medición sísmica. A la derecha se encuentra el módulo lunar Eagle. (Foto: NASA)
REAL. Buzz Aldrin parado sobre la superficie lunar junto a un instrumento de medición sísmica. A la derecha se encuentra el módulo lunar Eagle. (Foto: NASA)
REAL. Buzz Aldrin parado sobre la superficie lunar junto a un instrumento de medición sísmica. A la derecha se encuentra el módulo lunar Eagle. (Foto: NASA)

Redacción EE.UU.

EFE

El cincuentenario del inicio del primer viaje tripulado a la Luna fue conmemorado el martes en Estados Unidos con distintas actividades y homenajes a sus protagonistas, uno de los cuales, Michael Collins, instó a no quedarse en el recuerdo.

“No quiero volver a la Luna. Quiero ir a Marte. (John F.) Kennedy nos mostró el camino”, subrayó Collins, de 88 años.

Collins fue la estrella de las celebraciones en el Centro Espacial Kennedy, en Cabo Cañaveral (Florida), desde donde el 16 de julio de 1969, a las 09:32 hora local, despegó el cohete Saturno V que transportaba la nave con los tres astronautas que llegaron a la Luna el 20 de julio.

Con ayuda de los cientos de miles de personas que trabajaron en el programa Apolo de la NASA, Neil Armstrong, Buzz Aldrin y Michael Collins hicieron realidad la llegada del hombre a la Luna antes de que finalizara la década de los años 60, una meta que el presidente Kennedy había fijado en un famoso discurso en 1961.

El traje espacial de Armstrong
El nombre de Kennedy resonó el martes en Cabo Cañaveral y en el Museo Nacional del Aire y el Espacio, en Washington, donde el vicepresidente Mike Pence asistió a un acto en el que se presentó el traje espacial de Armstrong (fallecido en 2012), el comandante de la misión Apolo 11, que fue restaurado.

Collins propuso usar el nombre de Kennedy en el primer viaje tripulado a Marte, mientras el republicano Pence citó la famosa frase del asesinado presidente sobre la conquista de la Luna: “la aventura más azarosa, peligrosa y grande en la que la humanidad se haya embarcado”.

Pence mencionó sus recuerdos del día que hizo a los estadounidenses sentirse más orgullosos que nunca y destacó que, aparte de las contribuciones a la ciencia y el conocimiento humano, la llegada del hombre a la Luna hizo unirse al mundo y a un país, EE.UU., que estaba “dividido en los años 60”.

Armstrong fue no solo el “mejor” comandante que hubiera podido tener el primer viaje a la Luna, sino que además fue un “magistral” portavoz de esa jornada espacial que paralizó al mundo en 1969, dijo su compañero Collins, el único de los tres que no pisó la Luna, pues estaba a cargo de la nave.