Avanzan las labores por emergencias viales que se presentaron a principios de año en Santo Domingo

Situación. En la Galo Plaza aún no está habilitado el paso.
Situación. En la Galo Plaza aún no está habilitado el paso.

Con una excavadora de oruga se debe atender a todos los puntos afectados, por eso la demora en culminar los trabajos.

La primera semana de enero de este año se presentaron aguaceros tan intensos que ocasionaron varios problemas en la ciudad. Fueron más de 20 llamadas de pedidos de atención con maquinaria, de las cuales seis fueron obstrucción de alcantarillado y vía. En estos puntos se ha atendido pero han transcurrido más de dos meses y las vías no se habilitan por completo. La comunidad pide que se agiliten las labores.

Puntos

Julio César Rivadeneira, subdirector de mantenimiento vial del Municipio, explica que uno de los lugares es el sector conocido como La cubera, donde se obstruyó un ducto muy antiguo por el uso inadecuado de la ciudadanía. En el lugar hubo que cortar la vía, ya se colocó la nueva conexión, pero solo se ha habilitado un carril, esperan en los próximos días terminar el relleno del otro. Hay un 85% de avance.

En la calle entre las cooperativas Galo Plaza y Nuevo Santo Domingo el problema fue similar, aquí el paso aún no está habilitado.

En la Santa Rosa hay un 90% de avance, falta el mejoramiento de la capa de rodadura. Otra alerta se presentó en la Unión Cívica, junto a una unidad educativa, donde se perdió la vía con la obstrucción del alcantarillado. Rivadeneira explica que ya están listos los informes, pero necesitan que la maquinaria concluya en los lugares antes mencionados para ingresar a atender en este punto, “esperemos finalizar previo al inicio de las actividades académicas, solo esperamos tener la excavadora”, enfatizó. (VG)

Frases

“En la primera lluvia del año se hundió esa calle, pedimos que nos ayuden para que los estudiantes puedan circular”. Rosa Intriago, Habitante Unión cívica

“Pedimos que un encajonamiento, además, que se agiliten los trabajos porque no soportamos los malos olores”. Gilberto Sánchez, Habitante Nuevo Santo Domingo