Predeterminado

PASTOR FRANCO LOYOLA

“El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.» (Juan 3:18) Cuando usted compra una computadora, tableta o teléfono, ya viene con varios programas instalados. Muchas de las funciones que hacen estos dispositivos ya están predeterminadas.

Nos referimos a estas condiciones originales como a la configuración predeterminada. La humanidad tiene una configuración predeterminada también. A causa de la caída y del precio del pecado, todos nosotros comenzamos como enemigos de Dios y estamos bajo Su condenación. No tenemos que hacer cosas horribles para ser condenados, Jesús dijo: “ya ha sido condenado”. Esta verdad vital tiene dos lecciones importantes para nosotros. En primer lugar, no tenemos base para el orgullo de nuestro estado como cristianos. Comenzamos tan pecadores como todos los demás. No fuimos salvos porque de alguna manera teníamos menos por que ser perdonados, o debido a algo que hubiéramos hecho.

Somos salvos por la gracia a través de la fe solamente, y solo debido a la piedad de Dios. Pablo escribió: “¿Dónde, pues, está la jactancia? Queda excluida. ¿Por cuál ley? ¿Por la de las obras? No, sino por la ley de la fe” (Romanos 3:27). En segundo lugar, tenemos la obligación de extender la mano a aquellos que todavía están bajo la condenación y darles las buenas nuevas. No hay excusa para no declarar a Jesucristo como el único Salvador. Cristo salva, pero “¿Cómo, pues, invocarán a aquel en el cual no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán sin haber quien les predique? ¿Y cómo predicarán si no fueren enviados? Como está escrito: ¡Cuán hermosos son los pies de los que anuncian la paz, de los que anuncian buenas nuevas! (Romanos 10:14-15)

[email protected]