Después de varias horas de búsqueda sobre las aguas del río Tigua se halló el cuerpo de un niño de ocho años, quien la tarde del día domingo fue atrapado por la corriente.
Previo al percance, el ahora occiso se movilizaba a bordo de una canoa con su progenitor y un hermano de 6 años. Lastimosamente el caudal del afluente provocó que la embarcación se vire y que sus ocupantes queden a la deriva.
El padre nadó con la intención de ayudar a sus dos hijos. Sin embargo; sólo tuvo tiempo para sacar al más pequeño y el otro menor fue arrastrado por la corriente.
La tragedia ocurrió a la altura del kilómetro 50 de la vía Pedernales-Chamanga, (zona perteneciente a la provincia de Esmeraldas). Se presume que los pequeños acompañaban a su progenitor para que sufrague, pero en media navegación sufrieron el accidente.
En las tareas de rescate participaron los bomberos de Pedernales, salvavidas y aproximadamente 15 voluntarios, que eran familiares del menor. (JD)