La medida será adoptada por el proyecto del paso deprimido en el sector La Virgen.
A partir del lunes 12 de julio, se prevé que la avenida Quevedo únicamente acoja el paso de vehículos que circulan en dirección al centro de Santo Domingo, cambio que será aplicado desde la intersección con la Abraham Calazacón (anillo vial).
La intención es evitar congestionamientos vehiculares y tener más espacios para que las maquinarias operen tranquilamente en el sector, donde se prevén realizar extensas perforaciones para construir el paso deprimido.
Trabajos
Desde el lunes 5 de julio, arrancó la segunda fase de este proyecto, respaldado por un grupo de habitantes del sector y rechazado principalmente por los comerciantes.
Elvis Escudero, director municipal de Obras Públicas, indicó que se ha colocado el cerramiento en el sector de La Virgen para que los trabajos se desarrollen sin contratiempos.
Ayer, martes 6 de julio, ya no estaba el redondel que acogía las intersecciones de la Quevedo, Pedro Vicente Maldonado, Galápagos y Manuelita Sáenz.
La destrucción de este círculo se da porque en los próximos días habrá contraflujo en la avenida Quevedo. De acuerdo a las planificaciones de los encargados del proyecto y la Empresa de Transporte Terrestre, únicamente circularán los vehículos que asciendan al centro de la ciudad.
Escudero indicó que los buses y demás carros particulares tendrán que usar la avenida Chone. Además, puntualizó que la calle Manuelita Sáenz y la Oranzonas están 100% habilitadas para que los conductores opten por estas rutas alternas.
Reclamos
Según lo planificado en la zona tienen que permanecer agentes civiles de tránsito, pero algunos conductores aseguran que esto no se cumple a cabalidad.
«Tienen que orientar a la ciudadanía para que no cometa infracciones, no todos conocemos los cambios. Algunos agentes se paran por la entrada al parque Ecológico para cazar a los choferes que invaden la vía, lo ideal es que estén en la esquina informando que está prohibido el paso hacia la Chone», dijo Diego Moreira.
Un grupo de comerciantes continúan en oposición a la obra e incluso persisten en la acción de protección. Ante estos problemas, los representantes municipales reconocen que habrá afección, pero hacen hincapié que la gran mayoría de santodomingueños serán beneficiarios. (JD)