‘Mano débil en los controles’

Inconducta. La gente continúa protagonizando aglomeraciones.
Inconducta. La gente continúa protagonizando aglomeraciones.

Las autoridades locales no hacen cumplir al 100 % las disposiciones nacionales.

“Están prohibidos los espectáculos públicos”. Esa es una frase trillada que solo queda en teoría o letra muerta, pues la realidad es otra en Santo Domingo de los Tsáchilas.

A la desobediencia ciudadana se suma la falta de control por parte de los entes correspondientes. Las aglomeraciones masivas cada vez son más reincidentes y esto ha ocasionado un rebrote de contagios.

Miguel Orellana, gobernador de Santo Domingo de los Tsáchilas, nuevamente recordó que están prohibidos los espectáculos públicos. Sin embargo, en las últimas semanas existieron conciertos, encuentros deportivos, novenas y más actos de concentración masiva.

No todos cumplen

El aforo se irrespeta en la mayoría de lugares. El distanciamiento social nunca existió, las sanciones por el no uso de la mascarilla ya no se aplica con regularidad y el carnet de vacunación lo exigen en ciertos lugares.

Fabián Zambrano dijo que durante el fin de semana acudió a diferentes comercios de Santo Domingo, pero en ninguno observó el cumplimiento de las medidas de bioseguridad.

“La gente hacía fila para ingresar. En las manos nos roseaban un aparente alcohol, que más parecía agua, nunca me pidieron el certificado de vacunación y en la parte interna había más compradores que mercadería”, expresó el usuario.

Edison Salazar, intendente de policía, dijo que en conjunto con los integrantes de la Mesa de Biodiversidad sí aplican operativos, pero que hasta el momento han sido de supervisión y concienciación.

Aclaró que a partir de esta semana serán más rigurosos. Prevén reforzar los recorridos y comenzarán a aplicar las sanciones correspondientes a estos casos.

Más de cuatro mil ciudadanos

El domingo 26 de diciembre miles de personas se concentraron en una cancha. Salazar puntualizó que el espectáculo no estaba autorizado, sin embargo, los organizadores no hicieron caso y continuaron con la programación.

“Fuimos con el fin de suspender ese evento, lamentablemente el personal con el que contábamos fue escaso y hubo presencia masiva de personas que nos rodearon. Decomisamos el licor que se estaba expendiendo en ese momento, se solicitó refuerzos, pero solo llegaron cuatro del UMO y creo que 15 policías más”, expresó el Intendente.

Las autoridades aclararon que el acto no estaba autorizado. Además, estaban a la espera del parte policial para iniciar las sanciones correspondientes. (JD)

Descontento
Durante el fin de semana se clausuraron dos karaokes por temas de aforo e irrespeto de otras medidas de bioseguridad. Algunos propietarios de negocios piden que se actúe de manera imparcial, pues es claro que no en todos los sitios se aplican las clausuras.