Actualmente esperan el carro en los exteriores del automercado. En las noches el lugar es peligroso.
Personas que residen en las parroquias tienen problemas a la hora de coger el transporte público en Santo Domingo, para regresar a sus respectivos destinos.
Muchos salen a la ciudad con el dinero justo. No a todos les alcanza el presupuesto para financiar un pasaje extra, ya sea en bus urbano o taxi, para llegar a la terminal terrestre y embarcarse en los andenes.
La mayoría esperaba el transporte en la avenida Esmeraldas, cerca a la Y del Indio Colorado. Sin embargo, desde el fin de semana se deshabilitó esa parada para improvisar una en la calle Pedro Vicente Maldonado, en los exteriores del automercado recién inaugurado.
Problemáticas
La falta de comunicación y socialización hizo que muchos usuarios permanezcan en el paradero antiguo. Algunos se enteraban del cambio después de esperar alrededor de 40 minutos, “al ver que no pasaba el bus preguntamos a los comerciantes del sector y por ellos nos enteramos”, dijo uno de los usuarios.
El problema era más complejo para las personas que se movilizan con compras. Ellos tienen que ingeniárselas para caminar alrededor de tres cuadras con el peso y en ocasiones el carro no les pasó, porque los conductores optaron por otra ruta.
Inseguridad
Yerson Morales, habitante de Puerto Limón, cuestionó el cambio dispuesto por los representantes de la empresa municipal de Transporte Terrestre. La noche del lunes 11 de octubre esperó en medio de la lluvia y el transporte nunca llegó.
“Cambian cada rato sin dar un anuncio y ponen parada en cualquier sector, sin importarles si es peligroso o no. Tomen conciencia del riesgo que corremos en estos sitios desolados”, manifestó el usuario.
Evelyn Zambrano vive a la altura del kilómetro 14 de la vía Quevedo y también tuvo dificultades para coger la Ruta 23. “No hay señalética, tampoco se ve un policía que nos resguarde en este sitio desolado. Yo no sabía que iban a cambiar, en los buses jamás nos informaron sobre las nuevas rutas”.
Correcciones
Héctor Fiallo, gerente de la empresa municipal de Transporte Terrestre, reconoció que hubo inconvenientes y que algunos turnos no pasaron por la parada del automercado.
Dijo que la ruta ya estaba definida, pero muchos carros que venían por la avenida Esmeraldas no avanzaban a girar en la calle Guayaquil y esto imposibilitó el paso por el automercado.
Desde hoy, miércoles 13 de octubre, el punto de embarque será en la calle Santa Rosa y Pedro Vicente Maldonado. Es decir, la parada se la mueve algunos metros para que los buses viren en la calle del banco del Pichincha.
En noviembre
Se prevé cambiar el sentido de varios tramos viales para facilitar el paso de los intraparroquiales, proceso que aún está en socialización. Fiallo dijo se harán correcciones en los semáforos de La Chorrera, para que los transportes que suben por la vía Quevedo giren a la izquierda y tomen la avenida Abraham Calazacón hasta la vía Chone.
En la intersección con la calle Pedro Vicente Maldonado giraran a la izquierda. El tramo de la Guayaquil a la avenida Esmeraldas cambiará de sentido, para que los buses recorran por este sector y avancen hacia la terminal terrestre. (JD)