48 tacos de explosivos se utilizaron, pero el resultado no fue 100 % exitoso y continúa el cierre.
Se ha intentado de todo, pero las soluciones todavía no llegan de manera definitiva. El avance es lento, no por descuido de las autoridades provinciales sino por la dureza de la roca.
Ayer, martes 24 de mayo, se optó por el uso de material explosivo. El objetivo era demoler dos rocas que miden aproximadamente 15 metros de longitud, sin embargo, el resultado fue mínimo.
Detalles
La primera detonación controlada ocurrió aproximadamente a las 13:00 y se la consideró como prueba. En esa ocasión se usaron 12 tacos de dinamita, que fueron ‘sembradas’ en perforaciones hechas previamente en las piedras.
Al caer la noche, José Cevallos, jefe de vialidad en el Gobierno Provincial de Santo Domingo de los Tsáchilas, informó que en la segunda explosión se utilizaron 36 dinamitas. Es decir, 48 en toda la jornada del martes 24 de mayo.
“Sin la caída de estas rocas, que son muy fuertes, en dos días se hubiera habilitado la vía. Todavía no se puede dar una hora exacta para la culminación de los trabajos”, dijo Cevallos.
Apoyo
A los trabajos en la vía se sumó un equipo especializado del Batallón Montúfar, Policía Nacional y otras personas que conocen sobre actividades mineras.
Luis Ambuludí, administrador de la empresa minera artesanal ‘De hecho caldera’, explicó que se necesitó un compresor para proceder a dinamitar las piedras.
“Hay que hacerlo por partes. Nosotros traemos la máquina perforadora para colocar la dinamita y la Prefectura pone el compresor, el nivel de riesgo es mínimo”, acotó.
Planificación
Mañana, jueves 26 de mayo, volverán a usar explosivos para demoler el resto de las rocas. Este proceso será replicado las veces necesarias hasta conseguir tamaños adecuados para embarcarlas en las volquetas.
Otra de las prioridades es habilitar un carril de la carretera, pero al nivel del asfalto para permitir el paso vehicular de manera controlada y en ambos sentidos. (JD)