Alimentos sanos y gratuitos en el comedor ‘Santa Teresa de Calcuta’

SATISFACCIÓN. Las personas siempre encuentran un plato de sopa caliente en este lugar.

Desde hace dos años se lleva adelante esta labor social impulsada desde la iglesia católica.

Gabriela Gómez

Estudiante de la Escuela

de Comunicación de la PUCE- SD

Maricela, de 29 años de edad y de origen venezolana, acude a la hora del almuerzo al comedor social ‘Santa Teresa de Calcuta’, con sus cuatro hijos y su esposo, donde reciben un almuerzo sano y gratuito. Al igual que ella, en este lugar se alimentan cada día aproximadamente 100 personas de escasos recursos económicos.

Este trabajo social lo lleva adelante el padre Jorge Apolo junto a un grupo de fieles de la parroquia eclesiástica ‘Santísima Trinidad’, ubicada en la cooperativa de vivienda 17 de Diciembre, en Santo Domingo. Es apoyado por empresas, instituciones y personas solidarias que donan recursos o alimentos.

Iniciativa social nació en febrero de 2021, ya cumplió dos años y se han brindado en este tiempo alrededor de  44 mil almuerzos.

Continúan haciendo visitas para adquirir los productos y buscando benefactores.

Hay personas que llegan al lugar llevando un quintal de arroz, la comunidad también les colabora. La Cruz Roja no se queda atrás y hace llegar productos, así como la Diócesis que siempre está pendiente.

Voluntariado

Maura Córdova, voluntaria y coordinadora del lugar, es quien dirige la cocina, su día comienza a las 06:00, asistiendo a la feria de legumbres,  su labor termina a las 14:00. “Cada día pienso qué comida  hacer, para que no se repitan los platos”.

Para la preparación de los alimentos cuenta con dos grupos por semana, es decir, esta semana ingresa el grupo A y la siguiente el grupo B. La limpieza del lugar la hacen entre todos.

Todo funciona con voluntariado, si alguien desea ayudar puede asistir sin ningún compromiso, solo necesita la convicción de colaborar.

El almuerzo

Se les da un ticket, para que no haya desorden. Hay dos rondas de almuerzos, para que todos disfruten sentados y cuando hay más personas hacen una tercera entrega.

Al lugar llegan ciudadanos de todas las edades, pero en especial los recicladores y migrantes.

Aljobina Torres, de 71 años de edad, también almuerza aquí, vive sola y no cuenta con el dinero necesario para alimentarse dignamente, sus hijos solo le colaboran con el pago de la vivienda. Lleva medio año asistiendo al comedor solidario.

Eduardo Pérez, de nacionalidad venezolana, desde hace ocho meses llega con su esposa y sus dos hijas, agradecen a las personas que realizan esta labor social, ya que es de mucha ayuda.

Todos respetan las normas que exige el lugar, siempre hacer la oración, no estar en estado etílico, ni consumir drogas, llegar limpio y no decir groserías.

 

EL DATO
Las personas que deseen ser parte de este proyecto social se pueden unir, donando alimentos o recursos.

 

EL DATO
La obra social se mantiene a través de benefactores.