Maytté Gavilanes Martínez
Caminar por el Centro Histórico de Quito es un regalo para el espíritu. Recorrer sus calles, largas y empinadas, resulta un deleite para propios y extranjeros gracias a su bella e imponente arquitectura, la cual fue declarada por la Unesco como el primer Patrimonio Cultural de la Humanidad.
La ‘Calle de las Siete Cruces’, como se conoce a la García Moreno, muy cerca del Arco de la Reina, encubre a uno de sus tesoros en su cruce con la Rocafuerte. Ahí se encuentra el Convento de El Carmen Alto: una hermosa y antigua edificación que data del siglo XVI y que perteneció a Mariana de Jesús, que hoy da vida al Museo homónimo.
El lugar es parte de la Fundación Museos de la Ciudad y fue abierto al público el 5 de diciembre de 2013 como un espacio de reflexión en torno al patrimonio carmelita y como un sitio ideal para la presentación de actividades artísticas, culturales y educativas para la ciudad.
Espacio
El área del Museo se concentra en lo que fue la vivienda de la santa quiteña, y con el apoyo del Instituto Metropolitano de Patrimonio, a lo largo de cinco años, se ha acondicionado 23 salas de exposiciones donde se ha expuesto una nueva visión del arte religioso, así como la historia, la identidad y el patrimonio carmelita.
Recorrerlo es adentrarse en la vida de Mariana de Jesús, la ‘Azucena de Quito’, y descubrir a la comunidad de monjas Carmelitas Descalzas, que consagran su vida a la meditación, el silencio, la pobreza y la oración.
Espiritual
La parte posterior del Museo está asignado a la orden Carmelita. Tanto el Museo como el monasterio son espacios autónomos. La Orden, regentada por la hermana Verónica de la Santa Faz, está conformada por 21 religiosas que desarrollan múltiples oficios como: bordado, pastelería, confitería, perfumería y elaboración de vinos para consagrar, que son utilizados en diferentes iglesias de la ciudad.
Tome nota
El horario de El Carmen Alto es de miércoles a domingo de 09:00 a 17:30. Entrada: $3 adultos, $2 estudiantes con carné, $1 niños y tercera edad; personas con discapacidades entran gratis.El silencio reina en El Carmen Alto e invita a los visitantes a la meditación y al regocijo. Ante la mirada del espectador, el tiempo parece detenerse al contemplar la riqueza del arte religioso que guarda en su interior.
Museo
El Museo alberga más de 3.000 bienes culturales, entre obras de arte, orfebrería, libros, textiles, pinturas, tallas y objetos de uso cotidiano de los siglos XVI, XVII, XVIII y XIX, el repositorio de obras de arte del Museo de El Carmen Alto es vasto y diverso.
En los 360 años de existencia de este monasterio, muchos artistas han contribuido en su engrandecimiento. Uno de ellos fue el afamado Víctor Mideros, cuya obra habla de la vida de Santa Mariana de Jesús.
Las salas ‘Del Locutorio’ y ‘Vida de Santa Mariana de Jesús’ son las exposiciones permanentes de El Carmen Alto, que conjuntamente con las exposiciones temporales han exhibido una pluralidad de contenidos a sus visitantes.
Desde su inauguración, el público ha disfrutado de varias exposciones como: ‘Detrás de los muros del monasterio’, ‘Scala Coelli’, ‘Yo Cervantes’, ‘El Chigualo’, ‘Ecce Homo’, entre otras.
Educativo
Como parte de sus actividades, y pensando en los niños y adolescentes, el Carmen Alto ha desarrollado una atractiva propuesta educativa, que permite abordar con dinamismo la vida de Mariana de Jesús, los orígenes históricos y la vida cotidiana en El Carmen Alto, al igual que el arte religioso en el Monasterio Carmelita.
La oferta educativa del Museo incluye recorridos con personajes. También proponen ‘EduCarmen’, un proyecto de apoyo académico para los docentes que integra contenidos, talleres y otras actividades paralelas.
Al momento se exhibe ‘En la cruz: arte y relato en El Carmen Alto’, que muestra aspectos históricos, iconográficos y artísticos alrededor de la escultura de los crucifijos.
Esta exposición presenta algunas piezas artísticas de las colecciones de los museos Alberto Mena Caamaño y del Monasterio de El Carmen Alto, que se exponen por primera vez al público.