Incertidumbre

En el proceso social, la búsqueda necesaria es la integración que fortalece a todos, pero el planeta entero enfrenta grandes fragmentaciones sociales, mostrando una generalizada falta de liderazgo, entendida como la capacidad de enfrentar la complejidad y darle un camino de soluciones viables; en el horizonte, con escasas excepciones, no se perciben guías para las sociedades.

En nuestro caso tenemos un espectáculo alucinante, a cualquiera se le ocurre alcanzar el poder o al menos aparecer para satisfacer egos y otros intereses, no hay certidumbre de lo que nos espera, cuando todos en su discurso hacen motivaciones de tipo populista es decir el viejo encanto de la palabra aparentemente esperanzadora pero falsa y es donde los emotivos e incautos caerán.

¿Cómo sociedad desamparada, qué nos deparan elecciones convocadas con muchas dudas?, sumado un panorama de salud que arruinó el planeta y poderosas redes de datos que “intervienen”, además no somos un pueblo suficientemente ilustrado como para percibir verdad y engaño, más aún cuando el diseño del mensaje no es factura del candidato sino de los manipuladores de ‘imagen’, ¿qué podemos esperar en un mundo solo de ficciones?

Lo falso, presentado como información, fluye por las redes en forma de mensajes desestabilizadores que hacen que la mayoría de electores, gente joven y desocupada, en busca de una mejor opción según sus perspectivas, caigan en el engaño, porque no hay una propuesta coherente que diga las cosas y los porqués se hará tal o cual plan de gobierno.

La incertidumbre se resuelve con información, pero eso no es fácil de encontrar en este próximo evento, donde medios y comunicadores fabrican cosas a favor o en contra y no necesariamente se hacen análisis objetivos. La incertidumbre acecha ante la opacidad.