‘Decisión al apuro’ de Emgirs podría causar crisis ambiental

Composición. Los lixiviados son líquidos tóxicos con materia orgánica, metales pesados y algunos compuestos químicos producto de la degradación de la basura.
Composición. Los lixiviados son líquidos tóxicos con materia orgánica, metales pesados y algunos compuestos químicos producto de la degradación de la basura.

El contrato adjudicado a Villacapria es analizado. La empresa que, desde 2014 maneja estos residuos, no tendría capacidad técnica.

El tratamiento de lixiviados (líquido producido por la basura) en Quito está estancado, así lo informó Gabriela Dávila, gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Emgirs-EP).

Esto, pese a que el 24 de junio se declaró en emergencia al relleno sanitario El Inga, lo que facultaba a la institución a contratar a una empresa bajo régimen especial. Luego de 13 días (7 de julio) se le adjudicó el contrato de emergencia a Villacapria, responsable del tratamiento de lixiviados desde 2014, pese a que nació bajo el objeto social de “crianza y comercialización de especies de ganado, administración y control de haciendas, fincas, cultivos”. Y no fue hasta 2016 (casi dos años después de trabajar para Emgirs) que cambiaron su razón social a: “manejo de plantas industriales, desechos, entre otros”.

Esta vez, luego de más de mes de su contratación, los lixiviados siguen sin tratarse lo que podría derivar en una crisis ambiental para los ríos aledaños al relleno y sus moradores.

Mala decisión

Según dijo Dávila – tercer gerente en menos de dos años– se está analizando el contrato, pues Villacapria no tendría la capacidad técnica para hacerlo. Las declaraciones contradicen lo dicho por Emgirs, hace un mes, cuando indicó: “hasta el 29 de junio de 2020, fecha de cierre de recepción de ofertas, cuatro (4) proveedores presentaron sus ofertas, siendo la empresa VILLACAPRIA CIA. LTDA. quien cumplió las necesidades institucionales, requisitos y parámetros establecidos en los términos de referencia”.

¿Cómo se adjudicó un contrato a una empresa sin las capacidades técnicas? Dávila respondió: “por tener una decisión rápida no pudieron tomar, efectivamente, las decisiones correctas para tratar esos lixiviados y es por eso que hoy estamos en este problema”. También explicó que están analizando “la mejor forma para poder terminar este contrato”.

Se advirtió desde antes

Marianella Irigoyen, exsecretaria de Ambiente de Quito, ha indicado que esta situación fue denunciada en 2019 pero que ni la Alcaldía, ni el Concejo Metropolitano le hicieron caso. Es más, considera que su repentina salida del cargo se debe a las denuncias del mal manejo y lo que ella ha calificado como corrupción dentro del manejo de los residuos.

“En agosto (de 2019) lo denuncié y no sabían qué hacer para sacarme. El exgerente (de Emgirs) Hernán Alvarado intentó sobornarme. Me dijo: ‘no te preocupes, tú vas a tener tu parte, como van a tener todas las personas que están dentro de este grupo’”, aseguró en una entrevista con LA HORA.

Nueve meses sin tratamiento

Desde noviembre de 2019, los lixiviados producidos por las más de 2.200 toneladas de basura que, a diario, genera la capital, no han tenido tratamiento.

Xavier Sinche, quien asumió la gerencia de Emgirs (del 5 de junio al 6 de agosto) detalló, a un medio impreso, que para evitar un derrame se levantó el borde de tres de las piscinas más grandes. Con lo que se logró aumentar 3.000 m³ de capacidad, pero la meta era 7.000 m³ adicionales, hasta que Villacapria inicie operaciones.

Por su parte, Dávila dijo que desde el sábado anterior se habilitó una nueva piscina de 3.500 m³. Y detalló que dentro de su plan de contingencia está implementar dos más: una de 17.500 m³ y otra de 20.000 m³. “Para que los lixiviados tengan donde estar mientras nosotros verificamos la solución definitiva para el tratamiento ”, agregó.

André Silba, ingeniero químico, detalla que aumentar piscinas es una solución para un periodo corto, ya que los lixiviados sin tratar no solo contaminan los ríos cuando se desbordan, sino que también al evaporarse naturalmente (efecto que provoca su exposición al sol) potencia la proliferación de bacterias y emana sustancias altamente tóxicas que se dispersan por el aire.

Jorge Yunda, alcalde de Quito, dijo que están buscando una propuesta innovadora, como la de vaporizar los lixiviados y descartó que haya contaminación, pese a que los moradores del sector han denunciado que estos compuestos han llegado al río. (AVV)

Se ofrecióconstruir un nuevo depósito para la basura

Un plazo de 90 días (diciembre 2020) tiene la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop) para construir el cubeto 10B en el relleno sanitario de El Inga, cuya vida útil, indicó el exgerente de la Empresa Pública Metropolitana de Gestión Integral de Residuos Sólidos (Emgirs), Xavier Sinche, culminaría el 5 de septiembre.

Emgirs dio de baja el proceso de licitación en el que buscaba una empresa privada para que construya el cubeto 10 y firmó ayer un convenio con Epmmop, para que este proceso quede entre instituciones municipales.

El gerente de la Epmmop, Rafael Carrasco, detalló que la inversión es de $2 millones, aproximadamente. Gabriela Dávila, gerente de Emgirs, explicó que el cubeto 10 tendrá una vida útil de siete meses. Detalló, además, que el 9B está habilitado y que implementarán acciones para ampliar su vigencia hasta que el nuevo esté construido.