Joven fallece tras accidente de tránsito

SOLIDARIDAD. 300 personas, aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia.
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SOLIDARIDAD. 300 personas, aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia.
SOLIDARIDAD. 300 personas, aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia.
SOLIDARIDAD. 300 personas, aproximadamente, se apostaron en las afueras de emergencia.
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Redacción TUNGURAHUA

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna, Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada.

Según testigos del hecho, Ronnie iba a su casa ubicada en el barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta; sin embargo en el barrio al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Los hechos

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido del accidente de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato y practicarle la autopsia de Ley.

También fueron hasta el lugar del accidente para determinar las causas y saber qué fue lo que ocurrió para que perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado y que seguía un preuniversitario para alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la Medicina, pues ese era su sueño.

Era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad y dedicación en su comunidad. Siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Redacción TUNGURAHUA

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna, Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada.

Según testigos del hecho, Ronnie iba a su casa ubicada en el barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta; sin embargo en el barrio al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Los hechos

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido del accidente de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato y practicarle la autopsia de Ley.

También fueron hasta el lugar del accidente para determinar las causas y saber qué fue lo que ocurrió para que perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado y que seguía un preuniversitario para alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la Medicina, pues ese era su sueño.

Era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad y dedicación en su comunidad. Siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Redacción TUNGURAHUA

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna, Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada.

Según testigos del hecho, Ronnie iba a su casa ubicada en el barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta; sin embargo en el barrio al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Los hechos

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido del accidente de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato y practicarle la autopsia de Ley.

También fueron hasta el lugar del accidente para determinar las causas y saber qué fue lo que ocurrió para que perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado y que seguía un preuniversitario para alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la Medicina, pues ese era su sueño.

Era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad y dedicación en su comunidad. Siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.

Redacción TUNGURAHUA

Con el rostro lleno de lágrimas, la mirada perdida, las manos temblorosas y sin poder pronunciar palabra alguna, Marlene salió del sector de Emergencia del Hospital Básico de Pelileo.

La mujer estaba visiblemente desmoronada ante la pérdida de su hijo mayor Ronnie Gabriel T., quien la tarde de ayer tuvo un accidente de tránsito que le costó la vida.

“La ley de la vida es que los padres nos vayamos antes que nuestros hijos, así que debe ser insoportable tener que decirle adiós a alguien a quien le hemos dado la vida”, decía Rocío, vecina de la familia afectada.

Según testigos del hecho, Ronnie iba a su casa ubicada en el barrio Luz de América en Quitocucho de la parroquia Bolívar de San Pedro de Pelileo a bordo de su motocicleta; sin embargo en el barrio al parecer habría perdido el control del vehículo y se volcó.

El golpe fue tan grande que el joven de tan solo 18 años habría perdido la vida de contado luego del siniestro.

Los hechos

Uno de los vecinos que estaba cerca y escuchó el ruido del accidente de inmediato se comunicó con los familiares del joven quienes pidieron ayuda al ECU 911 para que lo socorra y lo trasladen hasta el Hospital, pero en la casa de salud solo confirmaron que ya no tenía signos vitales.

Hasta el lugar llegó personal del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) Tungurahua, quienes en presencia del Fiscal de turno realizaron el levantamiento del cadáver para posteriormente trasladarlo hasta el Centro Forense de Ambato y practicarle la autopsia de Ley.

También fueron hasta el lugar del accidente para determinar las causas y saber qué fue lo que ocurrió para que perdiera el control de su motocicleta.

Su historia

Entre los amigos, compañeros de colegio y vecinos que lo conocían comentaban que el joven recién se había graduado y que seguía un preuniversitario para alcanzar el puntaje necesario que le permita estudiar la universidad en una de las ramas de la Medicina, pues ese era su sueño.

Era el mayor de tres hijos y el ‘Guagua Pedrito’ como le decían en honor a su padre Pedro, era un referente de responsabilidad y dedicación en su comunidad. Siempre estaba ayudando a sus padres a trabajar en la agricultura.