En Quito se han construido apenas 700 de al menos 2.700 paradas de buses que se requieren para mejorar la seguridad y comodidad en el abordaje y descenso de usuarios, reclamó la Cámara de Transporte Público de Pasajeros de Pichincha a las autoridades de Movilidad.
El presidente del gremio, José Santamaría, dijo que la mayoría de este déficit se evidencia en “zonas periféricas de prácticamente toda la ciudad”.
Agregó que de acuerdo con los reportes de las propias operadoras, la reparación de infraestructuras deterioradas o la instalación de nuevas, “lastimosamente se ha concentrado en el hipercentro, excluyendo al resto de la ciudad”.
A este déficit de 2.000 paradas, con al menos una visera o techo para que los pasajeros se protejan del sol o de la lluvia, dijo el dirigente, se suma una falta de claridad sobre los lugares donde deben funcionar.
“En la Diego de Vázquez y en La Prensa en el norte, y, en la Napo, en el sur, los agentes hacen operativos de control y sancionan a los conductores por supuesto irrespeto de la parada. Pero en esas vías no hay señalización clara de dónde quedan las paradas y son los propios usuarios los que han decidido cuáles son los lugares de paradas”, dijo.
Inversión
Según un informe del estado de la red vial de transporte público presentado en julio anterior por la Secretaría de Movilidad a la Comisión de Movilidad, para mejorar las paradas, calzadas e infraestructura mínima de los corredores de buses y de las rutas de buses “convencionales y alimentadores” se requería una inversión de entre $80 millones y $100 millones.
El Dato
Cada día se realizan 2,1 millones de traslados, de los cuales al menos el 60% es en transporte público, según informe de la Secretaría de Movilidad.Este requerimiento consta en el plan para reorganizar las rutas y frecuencias de buses de cara al inicio de operaciones del Metro de Quito postergado de octubre anterior a septiembre del próximo año.
El sociólogo experto en urbanismo y movilidad, Galo Andrés Larenas, comentó que “mientras no exista una política de regularización del transporte urbano en todo el sentido de la palabra, no se puede esperar que exista un índice mínimo de educación ciudadana, que se pueden educar en función de las facilidades que brinda el Estado, pero en esta ciudad no existe ni infraestructura, ni política definida”.
Agregó que “sin paradas, sin señalización, los peatones y los pasajeros tienen que buscar la forma de adaptarse al sistema como sea. Es por eso que detienen los buses o se bajan donde sea. No hay respeto de las pocas paradas que existen”
Realidad
En un recorrido que este medio realizó en la zona de La Mariscal y en el sector de La Prensa, este medio verificó numerosos casos de irrespeto de las paradas. En el tramo de la avenida Amazonas comprendido entre Colón y Patria, donde sí existen paradas señalizadas, en menos de 10 minutos en una determinada mañana se constató al menos ocho casos de pasajeros que solicitaban que los buses se detengan en lugares distintos de las paradas.
Solo en uno de estos ocho casos un bus que cubría la ruta Condado-Congreso, que prácticamente circulaba semivacío, se detuvo a recoger al pasajero. Los otros 7 buses prosiguieron su camino. (JCER)
Otro tema
pendiente
La administración municipal de Jorge Yunda está a la espera que el Gobierno de Lenín Moreno establezca su anunciada política de subsidios de combustibles para actualizar y enviar a la comisión de Movilidad y al Concejo Metropolitano un proyecto de ordenanza de “Estructura tarifaria del transporte público”. En una primera versión de este proyecto, que la Secretaría de Movilidad presentó a Yunda a mediados de julio, se sugería un incremento a 35 centavos la actual tarifa de 25 centavos, vigente desde hace 16 años.
En Quito se han construido apenas 700 de al menos 2.700 paradas de buses que se requieren para mejorar la seguridad y comodidad en el abordaje y descenso de usuarios, reclamó la Cámara de Transporte Público de Pasajeros de Pichincha a las autoridades de Movilidad.
El presidente del gremio, José Santamaría, dijo que la mayoría de este déficit se evidencia en “zonas periféricas de prácticamente toda la ciudad”.
Agregó que de acuerdo con los reportes de las propias operadoras, la reparación de infraestructuras deterioradas o la instalación de nuevas, “lastimosamente se ha concentrado en el hipercentro, excluyendo al resto de la ciudad”.
A este déficit de 2.000 paradas, con al menos una visera o techo para que los pasajeros se protejan del sol o de la lluvia, dijo el dirigente, se suma una falta de claridad sobre los lugares donde deben funcionar.
“En la Diego de Vázquez y en La Prensa en el norte, y, en la Napo, en el sur, los agentes hacen operativos de control y sancionan a los conductores por supuesto irrespeto de la parada. Pero en esas vías no hay señalización clara de dónde quedan las paradas y son los propios usuarios los que han decidido cuáles son los lugares de paradas”, dijo.
Inversión
Según un informe del estado de la red vial de transporte público presentado en julio anterior por la Secretaría de Movilidad a la Comisión de Movilidad, para mejorar las paradas, calzadas e infraestructura mínima de los corredores de buses y de las rutas de buses “convencionales y alimentadores” se requería una inversión de entre $80 millones y $100 millones.
El Dato
Cada día se realizan 2,1 millones de traslados, de los cuales al menos el 60% es en transporte público, según informe de la Secretaría de Movilidad.Este requerimiento consta en el plan para reorganizar las rutas y frecuencias de buses de cara al inicio de operaciones del Metro de Quito postergado de octubre anterior a septiembre del próximo año.
El sociólogo experto en urbanismo y movilidad, Galo Andrés Larenas, comentó que “mientras no exista una política de regularización del transporte urbano en todo el sentido de la palabra, no se puede esperar que exista un índice mínimo de educación ciudadana, que se pueden educar en función de las facilidades que brinda el Estado, pero en esta ciudad no existe ni infraestructura, ni política definida”.
Agregó que “sin paradas, sin señalización, los peatones y los pasajeros tienen que buscar la forma de adaptarse al sistema como sea. Es por eso que detienen los buses o se bajan donde sea. No hay respeto de las pocas paradas que existen”
Realidad
En un recorrido que este medio realizó en la zona de La Mariscal y en el sector de La Prensa, este medio verificó numerosos casos de irrespeto de las paradas. En el tramo de la avenida Amazonas comprendido entre Colón y Patria, donde sí existen paradas señalizadas, en menos de 10 minutos en una determinada mañana se constató al menos ocho casos de pasajeros que solicitaban que los buses se detengan en lugares distintos de las paradas.
Solo en uno de estos ocho casos un bus que cubría la ruta Condado-Congreso, que prácticamente circulaba semivacío, se detuvo a recoger al pasajero. Los otros 7 buses prosiguieron su camino. (JCER)
Otro tema
pendiente
La administración municipal de Jorge Yunda está a la espera que el Gobierno de Lenín Moreno establezca su anunciada política de subsidios de combustibles para actualizar y enviar a la comisión de Movilidad y al Concejo Metropolitano un proyecto de ordenanza de “Estructura tarifaria del transporte público”. En una primera versión de este proyecto, que la Secretaría de Movilidad presentó a Yunda a mediados de julio, se sugería un incremento a 35 centavos la actual tarifa de 25 centavos, vigente desde hace 16 años.
En Quito se han construido apenas 700 de al menos 2.700 paradas de buses que se requieren para mejorar la seguridad y comodidad en el abordaje y descenso de usuarios, reclamó la Cámara de Transporte Público de Pasajeros de Pichincha a las autoridades de Movilidad.
El presidente del gremio, José Santamaría, dijo que la mayoría de este déficit se evidencia en “zonas periféricas de prácticamente toda la ciudad”.
Agregó que de acuerdo con los reportes de las propias operadoras, la reparación de infraestructuras deterioradas o la instalación de nuevas, “lastimosamente se ha concentrado en el hipercentro, excluyendo al resto de la ciudad”.
A este déficit de 2.000 paradas, con al menos una visera o techo para que los pasajeros se protejan del sol o de la lluvia, dijo el dirigente, se suma una falta de claridad sobre los lugares donde deben funcionar.
“En la Diego de Vázquez y en La Prensa en el norte, y, en la Napo, en el sur, los agentes hacen operativos de control y sancionan a los conductores por supuesto irrespeto de la parada. Pero en esas vías no hay señalización clara de dónde quedan las paradas y son los propios usuarios los que han decidido cuáles son los lugares de paradas”, dijo.
Inversión
Según un informe del estado de la red vial de transporte público presentado en julio anterior por la Secretaría de Movilidad a la Comisión de Movilidad, para mejorar las paradas, calzadas e infraestructura mínima de los corredores de buses y de las rutas de buses “convencionales y alimentadores” se requería una inversión de entre $80 millones y $100 millones.
El Dato
Cada día se realizan 2,1 millones de traslados, de los cuales al menos el 60% es en transporte público, según informe de la Secretaría de Movilidad.Este requerimiento consta en el plan para reorganizar las rutas y frecuencias de buses de cara al inicio de operaciones del Metro de Quito postergado de octubre anterior a septiembre del próximo año.
El sociólogo experto en urbanismo y movilidad, Galo Andrés Larenas, comentó que “mientras no exista una política de regularización del transporte urbano en todo el sentido de la palabra, no se puede esperar que exista un índice mínimo de educación ciudadana, que se pueden educar en función de las facilidades que brinda el Estado, pero en esta ciudad no existe ni infraestructura, ni política definida”.
Agregó que “sin paradas, sin señalización, los peatones y los pasajeros tienen que buscar la forma de adaptarse al sistema como sea. Es por eso que detienen los buses o se bajan donde sea. No hay respeto de las pocas paradas que existen”
Realidad
En un recorrido que este medio realizó en la zona de La Mariscal y en el sector de La Prensa, este medio verificó numerosos casos de irrespeto de las paradas. En el tramo de la avenida Amazonas comprendido entre Colón y Patria, donde sí existen paradas señalizadas, en menos de 10 minutos en una determinada mañana se constató al menos ocho casos de pasajeros que solicitaban que los buses se detengan en lugares distintos de las paradas.
Solo en uno de estos ocho casos un bus que cubría la ruta Condado-Congreso, que prácticamente circulaba semivacío, se detuvo a recoger al pasajero. Los otros 7 buses prosiguieron su camino. (JCER)
Otro tema
pendiente
La administración municipal de Jorge Yunda está a la espera que el Gobierno de Lenín Moreno establezca su anunciada política de subsidios de combustibles para actualizar y enviar a la comisión de Movilidad y al Concejo Metropolitano un proyecto de ordenanza de “Estructura tarifaria del transporte público”. En una primera versión de este proyecto, que la Secretaría de Movilidad presentó a Yunda a mediados de julio, se sugería un incremento a 35 centavos la actual tarifa de 25 centavos, vigente desde hace 16 años.
En Quito se han construido apenas 700 de al menos 2.700 paradas de buses que se requieren para mejorar la seguridad y comodidad en el abordaje y descenso de usuarios, reclamó la Cámara de Transporte Público de Pasajeros de Pichincha a las autoridades de Movilidad.
El presidente del gremio, José Santamaría, dijo que la mayoría de este déficit se evidencia en “zonas periféricas de prácticamente toda la ciudad”.
Agregó que de acuerdo con los reportes de las propias operadoras, la reparación de infraestructuras deterioradas o la instalación de nuevas, “lastimosamente se ha concentrado en el hipercentro, excluyendo al resto de la ciudad”.
A este déficit de 2.000 paradas, con al menos una visera o techo para que los pasajeros se protejan del sol o de la lluvia, dijo el dirigente, se suma una falta de claridad sobre los lugares donde deben funcionar.
“En la Diego de Vázquez y en La Prensa en el norte, y, en la Napo, en el sur, los agentes hacen operativos de control y sancionan a los conductores por supuesto irrespeto de la parada. Pero en esas vías no hay señalización clara de dónde quedan las paradas y son los propios usuarios los que han decidido cuáles son los lugares de paradas”, dijo.
Inversión
Según un informe del estado de la red vial de transporte público presentado en julio anterior por la Secretaría de Movilidad a la Comisión de Movilidad, para mejorar las paradas, calzadas e infraestructura mínima de los corredores de buses y de las rutas de buses “convencionales y alimentadores” se requería una inversión de entre $80 millones y $100 millones.
El Dato
Cada día se realizan 2,1 millones de traslados, de los cuales al menos el 60% es en transporte público, según informe de la Secretaría de Movilidad.Este requerimiento consta en el plan para reorganizar las rutas y frecuencias de buses de cara al inicio de operaciones del Metro de Quito postergado de octubre anterior a septiembre del próximo año.
El sociólogo experto en urbanismo y movilidad, Galo Andrés Larenas, comentó que “mientras no exista una política de regularización del transporte urbano en todo el sentido de la palabra, no se puede esperar que exista un índice mínimo de educación ciudadana, que se pueden educar en función de las facilidades que brinda el Estado, pero en esta ciudad no existe ni infraestructura, ni política definida”.
Agregó que “sin paradas, sin señalización, los peatones y los pasajeros tienen que buscar la forma de adaptarse al sistema como sea. Es por eso que detienen los buses o se bajan donde sea. No hay respeto de las pocas paradas que existen”
Realidad
En un recorrido que este medio realizó en la zona de La Mariscal y en el sector de La Prensa, este medio verificó numerosos casos de irrespeto de las paradas. En el tramo de la avenida Amazonas comprendido entre Colón y Patria, donde sí existen paradas señalizadas, en menos de 10 minutos en una determinada mañana se constató al menos ocho casos de pasajeros que solicitaban que los buses se detengan en lugares distintos de las paradas.
Solo en uno de estos ocho casos un bus que cubría la ruta Condado-Congreso, que prácticamente circulaba semivacío, se detuvo a recoger al pasajero. Los otros 7 buses prosiguieron su camino. (JCER)
Otro tema
pendiente
La administración municipal de Jorge Yunda está a la espera que el Gobierno de Lenín Moreno establezca su anunciada política de subsidios de combustibles para actualizar y enviar a la comisión de Movilidad y al Concejo Metropolitano un proyecto de ordenanza de “Estructura tarifaria del transporte público”. En una primera versión de este proyecto, que la Secretaría de Movilidad presentó a Yunda a mediados de julio, se sugería un incremento a 35 centavos la actual tarifa de 25 centavos, vigente desde hace 16 años.