Guerreras del porteo

Fotos y texto: Juan Diego Montenegro.

Una mirada íntima de la travesía que hace la mujer marroquí en la frontera por mejorar la vida de su familia.

El porteo (pasar mercancía sin altos impuestos por medio de bultos) es un modo de subsistencia que han encontrado los pobladores marroquíes, facilitado por el acuerdo existente entre España y Marruecos.

Las porteadoras, las madrugadas de los martes y jueves, cruzan la frontera con la intención de lograr uno de los 2.000 pases que se dan para ingresar al Polígono del Tarajal, donde se da este comercio.

Enfrentadas a la pobreza de su región, sin importar su edad o condiciones físicas, luchan contra los 40 grados veraniegos en cada carga –que puede llegar a los 100 kilos-. En su labor, no dejan de lucir las pesadas prendas que cubren sus cuerpos.

Fotos y texto: Juan Diego Montenegro.

Una mirada íntima de la travesía que hace la mujer marroquí en la frontera por mejorar la vida de su familia.

El porteo (pasar mercancía sin altos impuestos por medio de bultos) es un modo de subsistencia que han encontrado los pobladores marroquíes, facilitado por el acuerdo existente entre España y Marruecos.

Las porteadoras, las madrugadas de los martes y jueves, cruzan la frontera con la intención de lograr uno de los 2.000 pases que se dan para ingresar al Polígono del Tarajal, donde se da este comercio.

Enfrentadas a la pobreza de su región, sin importar su edad o condiciones físicas, luchan contra los 40 grados veraniegos en cada carga –que puede llegar a los 100 kilos-. En su labor, no dejan de lucir las pesadas prendas que cubren sus cuerpos.

Fotos y texto: Juan Diego Montenegro.

Una mirada íntima de la travesía que hace la mujer marroquí en la frontera por mejorar la vida de su familia.

El porteo (pasar mercancía sin altos impuestos por medio de bultos) es un modo de subsistencia que han encontrado los pobladores marroquíes, facilitado por el acuerdo existente entre España y Marruecos.

Las porteadoras, las madrugadas de los martes y jueves, cruzan la frontera con la intención de lograr uno de los 2.000 pases que se dan para ingresar al Polígono del Tarajal, donde se da este comercio.

Enfrentadas a la pobreza de su región, sin importar su edad o condiciones físicas, luchan contra los 40 grados veraniegos en cada carga –que puede llegar a los 100 kilos-. En su labor, no dejan de lucir las pesadas prendas que cubren sus cuerpos.

Fotos y texto: Juan Diego Montenegro.

Una mirada íntima de la travesía que hace la mujer marroquí en la frontera por mejorar la vida de su familia.

El porteo (pasar mercancía sin altos impuestos por medio de bultos) es un modo de subsistencia que han encontrado los pobladores marroquíes, facilitado por el acuerdo existente entre España y Marruecos.

Las porteadoras, las madrugadas de los martes y jueves, cruzan la frontera con la intención de lograr uno de los 2.000 pases que se dan para ingresar al Polígono del Tarajal, donde se da este comercio.

Enfrentadas a la pobreza de su región, sin importar su edad o condiciones físicas, luchan contra los 40 grados veraniegos en cada carga –que puede llegar a los 100 kilos-. En su labor, no dejan de lucir las pesadas prendas que cubren sus cuerpos.