En el Dillon, las mujeres mandan en la jura de la bandera

NOMBRAMIENTO. Heidi Pisuña fue proclamada abanderada del Pabellón Nacional en el Colegio Luis Napoleón Dillon.
NOMBRAMIENTO. Heidi Pisuña fue proclamada abanderada del Pabellón Nacional en el Colegio Luis Napoleón Dillon.

“Aprendí desde lo más básico hasta lo más complejo, aunque ahora sé que verdaderamente aprendí fue a ser una gran persona”, comentó Heidi Pisuña Simbaña , estudiante de tercero de bachillerato del colegio Luis Napoleón Dillon, quien ayer fue proclamada abanderada del Pabellón Nacional.

Para ella, este fue uno de muchos logros que quiere alcanzar en su vida. Reconoció el apoyo constante de sus padres, quienes la acompañaron en cada uno de sus pasos, alentándole a ser mejor cada día.

Su promedio fue de 9,704 y comenta que no tiene ninguna rutina de estudios. “Nada más basta poner empeño, ser ordenada y atender a clases”.

En un emotivo discurso frente a sus compañeros, expresó que junto a ellos ha experimentado sus mejores años. “Todos lloramos, reímos, gritamos con pasión las barras del colegio y forjamos grandes amistades. Todo eso permanecerá en mi corazón”.

Heidi es una de las 247.568 estudiantes del país que ayer cumplieron la ceremonia del Juramento a la Bandera. Ella y nueve mujeres más forman parte del cuadro de honor de su institución que desde el año lectivo 2001-2002 implementó la coeducación dispuesta en la Ley Orgánica de Educación Intercultural (LOEI). El cuadro de honor de cada institución está conformado por nueve estudiantes que tienen los más altos puntajes. Para obtener la valoración exacta se debe promediar la nota final de cada estudiante desde Segundo de Educación General Básica a Segundo de Bachillerato. (MLY)

FRASE

Si tienen un sueño, no se rindan”. Heidi Pisuña Simbaña Abanderada del Pabellón Nacional del colegio Luis Napoleón Dillon

Karen Tipán entregó el Portaestandarte del Colegio.

° ‘Ejemplo para mis hermanos’
Karen Tipán, de 16 años, es la mayor de tres hermanos y es muy segura. Cuenta que siempre se esmera por superarse y demostrar a sus padres que todo lo que ella se propuso lo va a lograr. “Me gusta compartir con mi familia pero nunca dejo de estudiar. Siempre hay prioridades”.

La joven siente que debe dar el mejor ejemplo a sus hermanos y que la contabilidad es algo que le apasiona.

Doménica Rivera entregó el Portaestandarte de Quito

° ‘Mi mayor motivación es mi familia’
Doménica Rivera, de 16 años, se define como una muchacha responsable, asegura que presenta todos sus trabajos y trata aprender todo lo que puede. Su familia, en especial su abuela, es su motivación más grande. Ella, es la menor de dos hermanos que también estudiaron en el Dillon.

Ella comparte su dedicación y empeño pues ellos también fueron estudiantes destacados.

Con mucha ilusión cuenta que le encantaría llegar a ser abanderada del Pabellón Nacional y cuando llegue la hora de entrar a la Universidad especializarse en tributación.

Doménica Proaño entregó el Portaestandarte del Pabellón Nacional

° ‘Quiero ser mejor para mí misma’
Doménica Proaño, de 15 años, asegura que su ilusión es dar lo mejor a sus padres. La joven es consciente del esfuerzo que a diario cumplen ellos en sus labores y asegura que quiere retribuirles de alguna manera. “Quiero darles lo mejor, porque ellos también me lo dieron. Siento que es lo poco que puedo entregarles después de todo lo que han hecho por mí”.

La joven confiesa ser perfeccionista con sus deberes y trabajos y que en los estudios intenta tomarse las cosas con calma. Se distrae cuando puede y estudia en sus tiempos libres.

Mi opinión en 60 segundos
Milena Almeida Instituto de género de la Universidad Central

‘Una buena noticia’
° Es una buena noticia que un cuadro de honor vaya representado por mujeres en una institución que tradicionalmente fue de varones. Lo que va señalando es que existe un mayor acceso a la educación y cada vez más las brechas y diferencias entre géneros van disminuyendo.