El agua potable que se consumirá en Quito los próximos 20 años vendrá de tres captaciones: dos del río Chalpi y una del río Encantado. La tubería para la conducción ya está en el país.
A través de un comunicado, la Empresa Pública Metropolitana de Agua Potable (Epmaps) informó que las piezas llegaron al puerto de Esmeraldas el 6 de marzo. La línea de conexión de 12 kilómetros la conformarán unos 1.290 tubos de acero.
La tubería de 16, 30 y 42 pulgadas transportará el líquido vital hacia el sistema Papallacta que se conecta con la Planta de Bellavista y Paluguillo. Las favorecidas directos serán las parroquias del nororiente y norte de Quito.
70
millones financiados por la Agencia Francesa de Desarrollo, sin garantía soberana.Trasladar el material desde Esmeraldas hasta Papallacta demandará de unos 300 viajes por vía terrestre. Luego se empezará con la instalación en cada una de las captaciones.
Fernando Larrea, director del proyecto Chalpi-Papallacta, informó que la obra captará 2,2 metros cúbicos de agua por segundo y garantizará el suministro de la misma hasta 2040. Aseguró que es uno de los mejores proyectos de los últimos 25 años.
Además de las captaciones se tiene previsto construir puentes sobre los ríos Papallacta y Chalpi Grande y la casa de máquinas para la Central Hidroeléctrica que generará 7.7 MW de electricidad. (PSD)