En Quito se busca mejorar la normativa contra el maltrato animal

Bienestar. La tenencia responsable de las mascotas es un tema que compete a los ciudadanos. Muchos dan el buen ejemplo.
Bienestar. La tenencia responsable de las mascotas es un tema que compete a los ciudadanos. Muchos dan el buen ejemplo.

Entre enero y noviembre, en todo el Distrito Metropolitano, se han presentado más de 800 denuncias por maltrato animal. Más de 200 mascotas han sido rescatadas de lugares que no cumplían con los requisitos mínimos de albergue. El 80% de los perros de la ciudad está en condición de abandono o semiabandono.

Esta preocupante situación es la que quiere ser atacada con una serie de nuevos controles y requisitos para los sitios que tienen algún tipo de acción en el bienestar animal. Desde veterinarias, albergues, refugios, dueños de mascotas hasta peluquerías necesitan una nueva normativa que minimice las negligencias y los abusos.

Cortar la cola a los cachorros, no tener un control de salud, mantenerlos en sitios inadecuados, no llevar un registro de las vacunas y no recoger sus excrementos. Todas estas son prácticas, entre muchas otras, que por desconocimiento o mala voluntad, constituyen formas de precarizar la vida de las mascotas.

Situación. En este año, casi 300 perros han sido rescatados de albergues sin condiciones mínimas de funcionamiento.
Situación. En este año, casi 300 perros han sido rescatados de albergues sin condiciones mínimas de funcionamiento.

Desconocimiento de la ordenanza
Johanna Aguirre, supervisora de la Agencia Metropolitana de Control (AMC), explicó que tanto la jornada realizada el mes pasado contra el maltrato animal como el proyecto de reformas a la normativa vigente sobre fauna urbana tienen varios objetivos. Por un lado, socializar el contenido de la mencionada ordenanza 0048 sobre la buena tenencia, la protección y el debido cuidado de las mascotas.

TOME NOTA
Para denunciar el maltrato llamar debe llamar al: 1800 500 900, de la Agencia Metropolitana de Control. “La mayoría de personas no conocen la normativa o la conocen de modo muy superficial. Por eso, aunque se establecen infracciones leves, graves y muy graves, casi ningún ciudadano las respeta”, dijo Aguirre.

Según datos de la AMC, hasta fines de noviembre había unos 121 procesos administrativos por infracciones muy graves a mascotas. La multa puede llegar hasta las 10 remuneraciones básicas unificadas (3.750 dólares).

El segundo objetivo es mejorar el bienestar animal mediante la capacitación a niños y sus familias sobre cómo cuidar a una mascota. Hay pautas claras y sencillas, que si son cumplidas, pueden operar un cambio sustancial en la vida de los animales domésticos.

“Hemos establecido las cinco libertades del bienestar animal para que las personas entiendan cómo deben actuar. Estas libertades dicen que las mascotas deben estar libres de hambre, sed o desnutrición; libres de miedos y angustias; libres de incomodidades físicas o térmicas; libres de dolor, lesiones o enfermedades; y libres para expresar las pautas propias del comportamiento”, apuntó la funcionaria.

Rescate. En Quito, como en otras ciudades de Ecuador, hay rescatistas de animales en abandono o maltrato.
Rescate. En Quito, como en otras ciudades de Ecuador, hay rescatistas de animales en abandono o maltrato.

Nueva normativa
El tercer objetivo, según Aguirre, es que los insumos resultantes de las mesas de discusión y las ponencias presentadas durante la ‘Jornada contra el Maltrato Animal’ (que se celebró a fines del mes pasado) sirvan para enriquecer el proyecto de reforma de la ordenanza 0048. “Buscamos que la norma tenga reglas claras y que incluya sanciones que no están contempladas, pero que en la práctica tienen alta incidencia en la calidad de vida de la fauna urbana de la ciudad”, añadió.

EL DATO
El 14 de noviembre, 120 jóvenes se graduaron de inspectores junior de la AMC dentro de la campaña contra el maltrato animal llamado ‘Ponte en mis patas’.Hay temas donde la legislación es muy leve o de plano inexistente. “Por ejemplo, se necesitan parámetros y sanciones claras para las clínicas veterinarias que utilizan medicamentos que no están autorizados”, dijo Hernán Pérez, animalista independiente.

Además, Aguirre puntualizó que se debe establecer una Licencia Única de Actividades Económicas para cada categoría involucrada en el cuidado animal, como hospital veterinario, clínica veterinaria, peluquerías, locales de venta de alimentos, entre otros.

“Esto permitirá que los ciudadanos conozcan a qué servicios puede acceder en cada establecimiento. No se puede ir a una peluquería y buscar que vacunen a tu animalito”, aseveró Aguirre.

Finalmente, las reformas a la ordenanza buscan que existan requisitos y responsabilidades definidas que deban ser cumplidas por los paseadores de perros, los criaderos, los albergues y los refugios. (JS)