En 2012 el centro de faenamiento fue cerrado y no se había concretado el proyecto para reemplazarlo.
Desde que hace cinco años, por causa de malas prácticas ambientales, se clausuró de forma definitiva el antiguo camal de Rumiñahui.
Los habitantes de este cantón han esperado ansiosamente la concreción del anhelado proyecto de un moderno Centro de Faenamiento y Planta Procesadora de Cárnicos.
Recientemente, mediante la firma de un convenio de crédito con el Banco de Desarrollo del Ecuador (BDE), esta aspiración comenzó a hacerse más tangible. La institución crediticia pública concedió al Municipio de Rumiñahui un préstamo de 6’550.500 dólares.
Estos recursos serán destinados en su totalidad al equipamiento y la construcción de la infraestructura del centro de cárnicos. El alcalde Héctor Jácome Mantilla explicó que esta obra beneficiará a todos los pobladores de la zona y de sitios aledaños como Quito, debido a la preocupante proliferación, en los últimos años, de camales clandestinos.
Camales clandestinos
Según datos proporcionados por Agrocalidad, a través de la Dirección de Salud del Municipio de Rumiñahui, existirían a la fecha alrededor de más de 100 ‘minicamales’, donde se faenan reses, porcinos y otro tipo de animales en las peores condiciones sanitarias.
Gran cantidad de esta carne tratada sin ningún control es transportada y comercializada de modo ilegal en ciudades como Quito y Cayambe. La Empresa Pública Metropolitana de Rastro estableció que al menos el 35% de la carne consumida en el Distrito Metropolitano procede de este tipo de camales clandestinos.
EL DATO
Aproximadamente se faenan ilegalmente más de 1.000 cerdos semanales en el cantón Rumiñahui. Jácome reconoció que el proceso para la construcción de la nueva infraestructura de faenamiento ha sido complicado, ya que se necesitan permisos de diferentes entidades. También relató que hubo una sanción económica por las condiciones en las que se faenaba en el excamal. Esta sanción alcanzó los 58.400 dólares.
Además confirmó que el Centro de Faenamiento y Planta Procesadora de Cárnicos se edificará en una superficie aproximada de ocho hectáreas en el sector de Loreto, en un área anteriormente perteneciente a la Universidad de las Fuerzas Armadas (ESPE).
Las nuevas instalaciones contarán con dos líneas de faenamiento, una para ganado porcino y otra para bovinos. El equipamiento tendrá tecnología de punta y los procesos de manejo se realizarán bajo las normativas ambientales vigentes.
La falta del camal y la demora en la concreción de un proyecto para sustituir las antiguas instalaciones provocó que en diciembre de 2015 una moción ciudadana pidiera la remoción Jácome. Esta petición no llegó a prosperar, pero fue un reflejo de la angustia social debido a este tema. (JS)