Actualmente, la economía venezolana es 31% menor a la ecuatoriana. El ingreso per cápita de un venezolano es 41% menor al de un ecuatoriano. El chavismo ha empobrecido de manera radical a Venezuela.
En los últimos 11 años, la economía venezolana ha vivido una tragedia. En 2013, todos los bienes y servicios producidos en ese país (Producto Interno Bruto) sumaban más de $400.000 millones.
A partir de ese año, de la mano del fin de la bonanza petrolera y la acumulación de malos manejos, la economía se fue en picada y llegó a un mínimo de $30.000 millones de PIB.
Actualmente, a pesar de una especie de rebote desde 2022, el PIB está en alrededor de $79.000 millones.
En otras palabras, la economía venezolana ha tenido un desplome de más del 80% desde 2013.
“Esto no es una caída, sino una tragedia. En economía es rarísimo ver desplomes de esta magnitud; ni siquiera en países en guerra. Esta caída del PIB se refleja en la salida de 8 millones de venezolanos porque su tierra ya no produce lo suficiente”, ha dicho recientemente Vicente Albornoz, decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad de las Américas (UDLA).
En los últimos años, incluso con los crecimientos desde 2022, el PIB de Venezuela ha tenido una caída promedio del -23%.
“La mejora económica que se ha producido en Venezuela es como si hubiéramos estado en el sótano 8 y ahora estamos en el sótano 4. No se refleja en mejores condiciones de acceso a la salud y a la educación. Existe una emergencia humanitaria compleja. Incluso hay profesores universitarios en situación de vulnerabilidad y desnutrición”, ha explicado Luz Mely Reyes, periodista y cofundadora de Efecto Cocuyo, en una reciente entrevista en el programa Políticamente Correcto.
Según Phase Consultores de Perú, tomando en cuenta datos del Fondo Monetario Internacional (FMI), solo para recuperar el nivel de PIB, Venezuela necesitará hasta 2065 (42 años) si lograra crecer a un ritmo del 3% anual.
Si logra un crecimiento mayor, es decir, del 8% o más, la recuperación podría tardar hasta 2040, o 17 años.
La economía venezolana es 31% menor a la ecuatoriana
Desde 2013, el PIB per cápita del venezolano ha caído a la mitad, pasando de $8.692 a $3.867.
Mientras que desde 2013, el PIB per cápita del Ecuador apenas ha aumentado de $6.161 a $6.583. De acuerdo con Carlos Mendoza, economista y consultor internacional, la economía ecuatoriana está estancada; pero la venezolana se fue en picada.
“Hace más de 10 años, el PIB per cápita ecuatoriano era $2.500 menor al venezolano. Ahora, el PIB per cápita ecuatoriano es $2.700 mayor al venezolano. Ecuador tiene una economía que crece poco y casi no genera empleo; pero Venezuela ha caído en el abismo de un modelo chavista despilfarrador e ineficiente”, puntualizó
Mendoza recalcó que Ecuador debe mirarse en el espejo de Venezuela y darse cuenta de que no se puede seguir equivocando en el manejo económico porque los resultados pueden ser desastrosos.
De acuerdo con Phase Consultores de Perú, actualmente un venezolano promedio tiene un ingreso que es 50% menos de lo que podía haber tenido su abuelo en términos reales, es decir, hace 60 años.
Las remesas alivian, pero no soluciona la crisis económica venezolana
Las remesas que llegan a Venezuela, que según Acnur tiene 7,7 millones de personas fuera del país, pasaron de $2.500 millones en 2020 a $5.400 millones en 2023 (116% de incremento).
Este mayor ingreso de remesas alivia, pero no soluciona la situación económica de los venezolanos y está, junto con la mayor producción petrolera, detrás del rebote producido desde 2022.
El salario básico en Venezuela está en alrededor de $3,56. Si a eso se suma bonos estatales por $126 y remesas promedio al mes de $15, se llega a un ingreso promedio de $145 mensuales. Ese ingreso está muy lejos del costo de $550 por la canasta básica. (JS)
¿Cuál es el plan de la oposición venezolana para rescatar la economía?
Sin cambios de fondo en el manejo económico de Venezuela, se proyecta que podría producirse una nueva crisis migratoria similar a las de 2014, 2017 y 2019.
La continuación del chavismo augura más de lo mismo en materia económica.
Edmundo González, quien terminó como candidato de la oposición ante la inhabilitación de María Corina Machado, ha sido muy escueto en sus propuestas económicas.
Sin embargo, para saber qué haría la oposición para salvar la economía, se puede revisar el programa electoral de Machado. Ese programa se basa en el aumento de la inversión, reforma de las finanzas públicas y una mayor participación del sector privado.
Machado esbozó un plan de dos etapas, iniciando por la recuperación y estabilización, pero se necesita una reforma profunda para acabar con el régimen de despilfarro de las finanzas públicas del modelo chavista.
En la línea de la motosierra de Milei en Argentina, Machado propone varias estrategias:
1.- Renegociar la deuda externa de Venezuela con los organismos internacionales para pagar en más tiempo y tener un periodo de moratoria mientras se reorganizan las finanzas públicas.
2.- Esquema de reducción y optimización gradual del gasto público. No se buscaría el superávit fiscal inmediato como Milei.
Para reducir el tamaño del Estado, la fórmula serían las privatizaciones. Es decir, todo lo que puede venderse, liquidarse, o darse como pago de la deuda, quedaría fuera de la esfera pública. En Venezuela existen más de 900 empresas estatales.
Machado ha propuesto un modelo inspirado en el estado de bienestar de Singapur. Así, se proyectaría la gestión privada de farmacias y hospitales; sistema de voucher para educación y esquema mixto de pensiones.
La meta final sería estabilizar y fortalecer la moneda para que sea viable comerciar más con el mundo e invertir. Eso solo se logrará con finanzas ordenadas en donde ya no se registre déficit de hasta el 8% del PIB.
Por otra parte, en la llamada fase de expansión, una de las apuestas más grandes es un plan para convertir a Venezuela en el mayor exportador de electricidad de América Latina. Esto incluye expandir la producción petrolera; pero también incentivar la generación solar e hidroeléctrica
Además, se apunta a levantar restricciones al comercio internacional, reducir aranceles y simplificar las aduanas.
Los altos impuestos, excesivas regulaciones y las expropiaciones han hecho de Venezuela una de las economías menos libres del mundo. Se ha llegado a registrar tasas negativas de Inversión Extranjera Directa (IED).
Machado propone dar garantías a los inversionistas y establecer diálogos recurrentes con las empresas privadas para saber qué necesitan para producir más y mejor.