En 2020 los moradores presentaron una denuncia a Fiscalía, pues sospechan que la venta del Hotel al consorcio chino CRBC fue irregular.
«Las ventanas del Hotel Quito permanecen cubiertas”, reclamó José María Lasso, presidente del Comité Pro Mejoras del Barrio González Suárez. El directivo lideró este 5 de junio de 2021 un plantón contra obras ilegales que habrían realizado dentro de la edificación.
Adentro, denunció el morador, se estarían haciendo adecuaciones al bien patrimonial, aunque la norma señala que para intervenirlo, los propietarios deben presentar el proyecto y contar con una autorización que le garantice al Municipio que no existen afectaciones ni cambios de consideración.
Pero según la edil Luz Elena Coloma, eso no se ha cumplido en los trabajos hechos recientemente (vea aquí) al interior del Hotel y que fueron denunciado por los moradores.
Ante esto, la Agencia Metropolitana de Control (AMC) realizó hace unos días una inspección en el lugar y clausuró los trabajos de un supuesto cambio de tuberías, pero que en realidad se trataría de un derrocamiento de las paredes de la edificación.
Plantón de tres barrios
Hoy, los miembros del Colectivo ‘Hotel Quito es Quito’, conformado por los barrios La Floresta, Guápulo y González Suárez, realizaron un plantón a las afueras del hotel para exigir vigilancia a las autoridades.
Lasso dice que hacen un llamado al Ministerio de Cultura para que se investiguen los cambios que se habrían realizado en la ficha técnica del inmueble.
También piden que el Instituto Nacional de Patrimonio Cultural (INPC) y el Municipio de Quito generen una estrategia para vigilar «día y noche el Hotel» y eviten una eventual destrucción.
Piden celeridad a Fiscalía
Marcelo Larrea, morador del sector, comentó que en diciembre de 2020 pusieron una denuncia ante la Fiscalía, para que se investigue la venta del Hotel.
El objetivo de la denuncia fue que se revise el proceso que autorizó la venta del Hotel Quito, considerado bien patrimonial desde 1998, y que fue vendido en 2016 a la empresa China Road and Bridge Corporation (CRBC), por $30,8 millones.
Larrea explicó que necesitan celeridad desde la Fiscalía para que, en caso de detectarse ilícitos, se revierta la adjudicación del Hotel y vuelva a sus dueños originales: pensionistas, jubilados y aportantes del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS). (AVV)