Un Quito lleno de retos para la nueva administración

CASCO COLONIAL. El Municipio capitalino amaneció resguardado y con vallas, para impedir que manifestantes se acerquen al edificio.
CASCO COLONIAL. El Municipio capitalino amaneció resguardado y con vallas, para impedir que manifestantes se acerquen al edificio.

Quito espera superar el «chuchaqui político» de la pelea por conseguir la alcaldía y dar paso a la tan ansiada reactivación económica.

Que la capital ecuatoriana no se convertirá en Suiza en los 22 meses que le quedan de administración, lo ha repetido en más de una ocasión Santiago Guarderas.

Asume la administración de la capital en medio de una crisis institucional que afecta directamente al funcionamiento de la ciudad, la más golpeada estadísticamente por la pandemia de la  Covid-19. Además, sus habitantes están a la expectativa de la tan ansiada reactivación económica, una materia pendiente sin un mensaje claro de cómo se logrará.

El Metro, la joya de la corona

El analista Fernando Carrión, en entrevista en días recientes con un medio televisivo, aseguró que en torno a esta construcción se deben tomar tres decisiones. La tarifa; la urbanización y articulación del Metro con la estructura vial de la ciudad; y, definir el modelo de gestión para su operatividad. Solventadas estas inquietudes llevaría a que este sistema de transporte opere en los próximos 12 meses.

La concejal Paulina Izurieta cree que para destrabar este proyecto es necesaria la definición del modelo de gestión. Lo califica como un “objetivo primario” que permitirá que pueda estar operativo. “No existe una unidad única que se encargue de este proceso (…). No podemos aventurarnos a decir una fecha de operación del Metro”, acotó.

Municipio con poca liquidez

Para Carrión, el nuevo Alcalde tendrá solamente el 15% del total del presupuesto a su disposición. Apuntó que el 40% se destina para la construcción del Metro y un tercio va al pago de 22.000 funcionarios. Esto se agrava al no recibir ingresos de parte del Gobierno central y los propios que genera el municipio.

Fernando Morales, concejal de Quito, mencionó que del presupuesto 2021 se ha ejecutado únicamente el 29%. En el 2019 en las administraciones zonales “no se pudo hacer uso de unos $10 millones”, meciona. A su criterio, eso evidencia que la “ejecución y planificación no van de la mano con el discurso” del exalcalde Yunda.

Ordenanzas detenidas

Carrión considera que el Concejo municipal debe dejar de lado los temas políticos y “dedicarse a trabajar”. Mencionó que existen ordenanzas detenidas por más de 12 meses, como por ejemplo, las encaminadas a la seguridad ciudadana; y, a la regulación de la venta y alquiler de edificios patrimoniales.

Morales dijo que la administración de Yunda dejó “varias ordenanzas pendientes”. Por ejemplo, el “segundo debate para la reforma a la ordenanza de Quito Honesto”, pendiente de debate desde hace ocho meses.

Izurieta apunta como prioritario el Plan de Gestión de Uso del Suelo postergado de debate y aprobación por la pandemia del Covid-19. “Tenemos dos meses para aprobarlo (…) Puede ser causal de remoción de los concejales”, sostiene. (AS)