Un ‘ejército’ oculto resguarda La Ronda, en Quito

DESTINO. La Ronda es una de las calles más tradicionales de Quito y ha sido cuna de pintores, escritores y poetas.
DESTINO. La Ronda es una de las calles más tradicionales de Quito y ha sido cuna de pintores, escritores y poetas.

Junto a la Policía Nacional, los dueños de negocios y artesanos han implementado medidas de seguridad para que el turista tenga una experiencia satisfactoria en esta calle histórica. 

El Centro Histórico de Quito pertenece al Distrito Manuela Sáenz, que está conformado por 92 barrios. Uno de ellos es La Ronda, un espacio cuya historia está marcada por los cambios.

Quienes han vivido décadas en esta histórica zona enfatizan en que no es la calle que era hace más de 15 años, cuando inició su regeneración. En ese entonces, el objetivo era convertirla en un espacio turístico y “con oferta para toda la familia”, dice Ramiro Torres, presidente de la Asociación de Emprendedores Turísticos de La Ronda.

Primeros meses sin asaltos

Patricio Vargas, comandante del Distrito Manuela Sáenz, señala que este gran sector es un epicentro político del país. “De los cinco poderes del Estado, tres están acá: Presidencia, Asamblea, Consejo de Particpación Ciudadana (…) Hay que tomar en consideración que todos los días tenemos movilizaciones por parte organizaciones sociales y políticas”. Por tanto, el 40% de la capacidad operativa de la Policía Nacional se orienta al control del orden público. “Quedándonos apenas con el 60%, para el control de violencia y delincuencia”, agrega Vargas.

La Ronda es un espacio “que ha sido muy bien recuperado por los mismos comerciantes”, dice el comandante del Distrito.

Tras la pandemia, La Ronda busca reactivarse -a través del turismo– todos los días, con el apoyo de la Policía, que tiene una oficina permanente con uniformados especializados, que incluso hablan varios idiomas, para atender a visitantes extranjeros.

Torres agrega que hay un trabajo en equipo de los dueños de restaurantes, cafeterías y artesanos con la Policía. Eso ha permitido que en este 2023 no existan reportes de asaltos a turistas.

Vargas destaca que La Ronda “tiene un ejército escondido, oculto”, ya que los habitantes reportan las novedades del sector y están alertas ante situaciones que puedan ser atípicas.

José Rodríguez, dueño de un restaurante, destaca que todos los locales tienen alarmas o botones de pánico. Además, hay 22 cámaras de seguridad. Germán Campos, artesano, dice que en la casa 925, donde los turistas pueden ver cómo las manos de los artistas transforman la materia prima en obras de arte, cuenta con guardianía las 24 horas.

Campos dice que no se puede hablar de que la Ronda sea un sitio 100% seguro, pero asegura que los vecinos hacen todo lo posible para reactivarse. “Tratamos que el espacio tenga buenas condiciones, desde la limpieza, porque las calles sucias atraen a indigentes”, señala.

Martha Pacheco, la hojalatera de La Ronda, quien es una de las comerciantes más antiguas de esta calle, dice que no solo este lugar lucha por reactivarse, sino toda la capital.

“El que viene a La Ronda va a encontrar un lugar que ha abierto la puerta a mucha gente. La Ronda ha tenido etapas, primero era familiar, luego era peligrosa y luego se rehabilitó”, explica Pacheco al destacar que tras la pandemia viven un nuevo proceso.

“Si usted viene de noche, como en toda casa, que hay desatinados lo hay, pero estamos tratando de arreglar todo eso. Hay locales que tratamos de sacar La Ronda adelante”, agrega.

Torres comenta que continuamente, además de políticas enfocadas al turismo, los habitantes y dueños de locales de La Ronda reciben cursos de primeros auxilios, defensa personal y otras estrategias “que no siempre están visibles, pero que producen”, destaca. (AVV)

“Puedo decir con certeza que La Ronda se ha convertido en un barrio bonito y seguro”, Patricio Vargas, comandante del Distrito Manuela Sáenz.

La Marín, El Tejar, San Roque y San Diego están entre los barrios más conflictivos del Distrito Manuela Sáenz.
Nueve uniformados trabajan en la Oficina de Policía Turística de La Ronda. Tres policías por cada turno.