Entre un estado de ánimo y una condición de salud mental hay una delgada línea que divide a la tristeza y a la depresión. Pensar que son lo mismo provoca que no se busque ayuda a tiempo. Diciembre es el mes con más suicidios.
Aunque puedan parecer lo mismo, la tristeza y la depresión son cosas muy distintas y aprender a diferenciarlas puede salvar una vida.
Claudia Hidalgo, psicóloga, señala que la mayoría de personas confunde la tristeza con la depresión o viceversa.
“La tristeza es un estado de ánimo que tiende a ser pasajero. Puede haber una situación en concreto que me haga sentir mal, pero que se supera a corto o mediano plazo”.
Por otro lado, la depresión es un estado de salud mental que requiere de un diagnóstico desde la psicología y la psiquiatría. “La depresión incluye como un síntoma a la tristeza, pero tiene unas características concretas, como por ejemplo, que el estado de ánimo triste dura mucho tiempo”.
Hidalgo comenta que la tristeza está catalogada como algo normal “nuestra vida transita por diversas emociones o sentimientos y eso está bien”.
Pero la depresión, a veces se presenta como una tristeza profunda, “que no siempre deriva de una causa. Es decir, no tengo ánimo pero no puedo entender qué me causa malestar”.
La depresión se convierte en un estado de ánimo abrumador, que se prolonga en el tiempo y que causa impactos en la vida diaria.
“No tengo ganas de levantarme, bañarme, trabajar o estudiar”, dice Hidalgo.
La Asociación Americana de Ansiedad y Depresión (ADAA, por sus siglas en inglés) señala que existen diferencias marcadas entre el sentimiento y el estado mental.
Por ejemplo, estar triste puede estar causado por hechos cotidianos o comunes: La pérdida o ausencia de un ser querido, un divorcio, la pérdida de trabajo, problemas financieros, no aprobar un examen. La persona que experimenta tristeza puede encontrar algún alivio al llorar, desahogarse o hablar sobre sus frustraciones.
Pero si el mal humor o las ganas de llorar aumentan con el tiempo o duran más de dos semanas, es necesario acudir a un especialista.
Indicadores
Desde el año 2020, los pacientes que acudieron a una cita por depresión aumentó un 58% a escala mundial. En Ecuador, en lo que va de 2023, ha habido 619.781 atenciones mentales en el Ministerio de Salud Pública.
Entre los síntomas que permiten identificar la depresión están:
- Sentimientos de desánimo.
- Tristeza.
- Desesperanza.
- Falta de motivación.
- Pérdida de interés en actividades que una vez se disfrutaron.
Cuando estos indicadores aparecen y no se tratan con un médico, la persona puede tener pensamientos suicidas. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) determina la asfixia, las armas de fuego, la intoxicación con drogas y alcohol y el envenenamiento con productos químicos o pulguicidas como los métodos más comunes para cometer suicidio.
En Ecuador, el suicidio es la segunda causa de muerte en menores de 17 años y la cuarta causa de mortalidad en jóvenes de 18 a 29 años.
En los últimos años, según datos del ECU-911, durante la época de diciembre, aumentan los casos de intento de suicidio. Hidalgo destaca que esta es una conducta que se repite en todo el mundo pues “la época navideña puede aumentar más el sentimiento de vacío, ya sea emocional o financiero”.
Otro síntoma de la depresión es alejarse de sus familiares y amigos o dejar de hacer actividades cotidianas como pasatiempos o acudir a la escuela o el trabajo. (AVV)
Síntomas de la depresión
- Estado de ánimo deprimido diario que dura la mayor parte del día, casi todos los días, con señales notables de desesperanza y tristeza
- Pérdida de interés en actividades normales durante un período prolongado
- Pérdida o aumento de peso significativo y no intencional
- La falta de de sueño o querer dormir en horarios normales
- Cansancio o poca energía
- Sentimientos de inutilidad o culpa excesiva a diario
- Incapacidad para concentrarse o tomar decisiones
- Pensamientos recurrentes de muerte, pensamientos suicidas o intentos o planes de suicidio
La tristeza tiene vínculos con un desencadenante específico, la ansiedad muchas veces no identifica una causa concreta.
La Secretaría de Salud de Quito habilitó la línea 101 opción 9 en caso de requerimientos de salud mental y con el objetivo de prevenir suicidios.
En lo que va de 2023, se han registrado 303 suicidios y más de 600 intentos.