Sector automotriz, pesquero y eléctrico concentran el 70% de los subsidios a los combustibles

El 71% de los combustibles subsidiados están destinados para el sector automotriz, pesquero y eléctrico.

Según la última actualización de Petroecuador, realizada con corte al 10 de marzo de 2021, actualmente hay 24 tipos de combustibles y derivados que están subsidiados en el país. De ese total, el 71% se concentra en tres sectores.

Así, las actividades pesqueras y camaroneras tienen ocho productos, entre diésel, extra y gasolina, para tareas artesanales, que tiene en promedio 0,60 de subsidio por galón.

En segundo lugar, en el sector automotriz se mantienen cinco precios parcialmente financiados por el Estado, entre diésel, ecopaís, extra, GLP para taxis. El costo subsidiado promedia los $0,45 por galón.

En tercer lugar, el sector eléctrico recibe precios subsidiados, en un promedio de $0,62 por galón, a través de cinco tipos de combustibles como diésel, fuel oil 4 y residuos.

Por otro lado, la aviación, por fuera de los aeropuertos concesionados al sector privado (Quito y Guayaquil), tiene costos menores en el Avgas y el Juel oil.

En el caso de la industria, comercio y la agricultura, el Estado mantiene subsidios de alrededor de $0,45 por galón en un tipo de gasolina para cada actividad.

Finalmente, el gas de uso doméstico, con un costo de hasta $600 millones al año, se mantiene con un subsidio de $0,63 por galón.

Ineficiencia

Oswaldo Erazo, docente y secretario ejecutivo de la Cámara de Distribuidores de Derivados de Petróleo del Ecuador, explicó que el manejo inadecuado del sistema de bandas ha provocado que, en lugar de reducirse, se haya ido acumulando más subsidio para la extra y ecopaís, desde noviembre 2020.

“Si se hubieran subido los precios en $0,01 o $0,02 centavos por mes, dentro de lo que permite el sistema de bandas, no se habría recurrido a los $0,08 centavos de incremento de golpe a partir de marzo 2021”, dijo.

Erazo puntualizó que los subsidios no son buenos o malos por si solos, pero su utilidad depende de a quiénes beneficia y cómo se los aplica. “El Gobierno ha tenido una política errática y mal asesorada sobre el tema. Las mesas de diálogo nunca tomaron en cuenta los puntos de vista y la participación de todos los sectores involucrados”, acotó.

Entre las principales distorsiones está el hecho de que actividades como la pesca se llevan un gran porcentaje de la ayuda estatal; pero otras dentro de la agricultura, como la producción lechera, entre otras, no reciben nada.

“Se hace un análisis parcializado sin tomar el impacto de las medidas. Eso genera ineficiencias y, ante la falta de controles, provoca que combustibles subsidiados se utilicen ilegalmente en otras actividades”, acotó Roberto Izurieta, economista.

Asimismo, en el caso del sector automotriz, los precios suben, pero no hay certezas sobre cómo se mejorará la calidad de los combustibles y se invita a los privados a importar, pero asumiendo grandes costos (Impuesto de Salida de Divisas, uso de las instalaciones de almacenamiento de Petroecuador, entre otros) que hacen muy difícil la competencia en un mercado regulado por el Estado.

Además, los márgenes de comercialización para los distribuidores y estaciones de servicio no se han revisado en casi 20 años. Erazo alertó que se está llegando a límites críticos donde, por ejemplo, la única estación de gasolina en Zumbahua se tuvo que cerrar por falta de viabilidad financiera. (JS)

Con $40 por barril de crudo, se estimaba que, hasta de julio 2021, el diésel ya no tendría subsidio. Pero, con los precios actuales (más de $60), se necesitará un año más de ajustes.