La medida dejó de ser técnica. Hace más cara la afiliación al IESS y complica los costos de las microempresas.
Según los últimos datos oficiales, solo 450.000 personas se benefician de una subida del Salario Básico Unificado (SBU). Eso representa el 10% de toda la Población Económicamente Activa (PEA).
El 11 de noviembre de 2022 se realizó la primera reunión del Consejo Nacional de Trabajo y Salarios para decidir el SBU para 2023. Sin embargo, la microempresaria Johanna Fabara aseguró que esas reuniones casi nunca sirven. “No se decide nada en esa instancia, sino en el despacho del Presidente de la República de turno. La subida del salario mínimo es una movida política que beneficia directamente a una minoría, pero complica la vida de la mayoría”, dijo.
Si se analiza el empleo adecuado, el porcentaje de beneficiarios de una mejora en el SBU ha bajado del 18% al 15%. Esto debido a que los puestos de trabajo a nivel de los pequeños negocios y las microempresas se ha precarizado.
Además, según Manuel González, economista, la reactivación económica se ha concentrado en la gran industria, los grandes exportadores y el sector petrolero y minero (aumento de los precios internacionales); pero ha dejado de lado a sectores que emplea mano de obra menos cualificada y que tradicionalmente gana el ingreso básico en un gran porcentaje.
Así, por ejemplo, la construcción y el servicio doméstico registra caídas del -25% y -31%, respectivamente.
“Esto es una señal de que la recuperación es bastante desigual y que no está llegando a los sectores más vulnerables de la sociedad”, recalcó González.
Reformas necesarias
En las actuales circunstancias, como pasó en los dos Gobiernos anteriores, la administración de Lasso se queda en la medida popular de subir el SBU; mientras los cambios y las reformas estructurales siguen a la espera.
El aumento del costo laboral, sin que exista mayor productividad ni más flexibilidad para contratar solo redunda, de acuerdo con Carla Bedón, microempresaria del sector de los restaurantes, obliga a contratar solo el mínimo necesario; y en muchos casos a optar por fórmulas entre la formalidad y la informalidad que permiten mantener vivo el negocio .
“Un aumento de $25 en el salario mínimo significa encarecer en más de $32 mensuales el costo laboral de un micronegocio. Eso es casi $400 adicionales por trabajador al año. Puede parecer poco, pero para emprendimientos de subsistencia, que son todavía la mayoría en el país, si tiene un impacto importante”, puntualizó.
La subida del SBU también afecta a la creciente población de trabajadores autónomos o independientes. Entre otras cosas, se encarece el acceso a la afiliación voluntaria al IESS, la cual está atada al ingreso mínimo establecido por ley.
Esto no solo ahonda en la desprotección de los autónomos, sino que es un bumerán para la seguridad social, debido a que gran parte del aumento de los aportantes ha venido del sector de los autónomos durante los últimos meses.
Economía real
Guillermo Lasso posicionó la promesa de llegar a los $500 de SBU hasta 2025. Eso representa un aumento de $25 cada año, o alrededor del 6%.
Sin embargo, encuestas hechas por auditoras como Deloitte o PwC Ecuador apuntan a que el aumento salarial en las empresas privadas, dentro de los sectores más dinámicos y sólidos de la economía, no puede superar el 3% anual.
Entre esos sectores están las grandes multinacionales, las empresas de comercio mayorista, las farmacéuticas, entre las principales.
Esto quiere decir que los aumentos decretados desde la política representan al menos el doble de lo que realmente puede asumir una economía como la ecuatoriana que, desde 2015 a 2020 venía en continua caída; y recién en 2021 volvió a crecer por encima del incremento de la población.
LA HORA, en una nota publicada el 18 de noviembre de 2021, ya analizó que una de las causas de los bajos ingresos en Ecuador, y el poco espacio para aumentos salariales, está ligado a la baja creación de empresas, la poca competencia y la todavía baja apertura comercial, entre otros aspectos. (JS)
En 2021, el Gobierno ya subió $25 el Salario Básico Unificado (SBU) hasta $425. Todo apunta a que se repetirá la fórmula.
Subida del Salario Básico aumenta el consumo y no afecta cifras fiscales
Al ser consultado sobre la subida del Salario Básico Unificado (SBU), Pablo Arosemena, ministro de Economía, aseguró que la palabra del pPresidente siempre se cumple; y es una visión clara del Gobierno.
Además, el funcionario puntualizó que un nuevo aumento, de $425 a $450, desde enero de 2023 no genera ningún problema en el sector público.
“Eso es algo que está debidamente presupuestado porque de alguna forma el nivel promedio salarial en el sector público está por encima del Salario Básico. No tienes una real afectación”, dijo.
“Tenemos una economía que tiene una dinamización e incremento en ventas que nunca se ha tenido, a pesar de los problemas. Todavía falta mucho camino por recorrer, pero pienso que podría ser algo muy positivo seguir dinamizando la economía a través de más producción, más inversión y más consumo”, concluyó
Evolución del Salario Básico
año monto
2011 264
2012 292
2013 318
2014 340
2015 354
2016 366
2017 375
2018 386
2019 394
2020 400
2021 400
2022 425
2023 450*
*Expectativa si se concreta el nuevo aumento
Aumento en las dos últimos Gobiernos
Rafael Correa SBU Crecimiento economía
2011-2014 $76 5,50%
2014-2107 $35 1,25%
Lenín Moreno SBU Crecimiento economía
2017-2021 $25 -1,02%
Guillermo Lasso SBU Crecimiento economía
2022-2023 $50* 3,3%
*expectativa si se concreta el nuevo aumento