El Departamento de Estado de los Estados Unidos prohíbe la entrada de Rafael Correa y Jorge Glas. Conozca las razones. El expresidente, radicado en Bélgica, emitió una carta de respuesta.
Rafael Correa y Jorge Glas tienen prohibición de ingresar a los Estados Unidos. Así lo informó el Departamento de Estado de Estados Unidos, este 9 de octubre de 2024, «por su participación en casos significativos de corrupción durante sus administraciones», señala el gobierno de Joe Biden, en un comunicado donde agrega: «Estados Unidos apoya a los ecuatorianos, incluidos los miembros de la sociedad civil, las fuerzas del orden y los periodistas de investigación, comprometidos con aumentar la transparencia gubernamental y exigir cuentas a los funcionarios públicos corruptos«.
Pero la medida también impacta a la familia de los exmandatarios. Por lo que ellos tampoco podrán ingresar a Estados Unidos: Anne Malherbe Gosselin (esposa de Rafael Correa) Sofía Correa, Anne Dominique Correa, Rafael Miguel Correa (hijos) Cinthia Díaz Aveiga (cónyuge Jorge Glas) y Jorge Glas Díaz (hijo).
Declaraciones del #EmbArtBrown ante el anuncio del @StateDept de designar al expresidente ecuatoriano, Rafael Vicente Correa Delgado, y al exvicepresidente, Jorge David Glas Espinel, como no elegibles para entrar a los EE.UU. #EstamosUnidosEC pic.twitter.com/fcBAvQxqaQ
— US Embassy Ecuador (@USembassyEC) October 9, 2024
Actualmente, Rafael Correa vive en Bélgica y no puede regresar a Ecuador pues tiene sentencia ejecutoriada por el caso Sobornos. Jorge Glas permanece en La Roca, desde abril de 2024.
Correa reaccionó al comunicado de Estados Unidos y señaló que: «La maldad humana (…) Obvian que nadie en el MUNDO ha aceptado la sentencia por «influjo psíquico» y que 5 países han dado asilo político a los involucrados en el Caso Sobornos. Meten hasta a mi familia. ¡No hay derecho!»
Carta de Rafael Correa ante la negativa de entrada a Estados Unidos
Ante la decisión de Estados Unidos, Rafael Correa emitió una carta que dice: «el 9 de octubre de 2024, en escueto comunicado de prensa, el Departamento de Estado de EE.UU. anuncia que me ha puesto a mí, a mi esposa y a mis tres hijos en la lista de no elegibles para visa estadounidense, por supuestamente haber sido yo un funcionario “corrupto”. Así esta infamia fuera cierta, la responsabilidad penal es individual y no por consanguinidad, una barbarie de la premodernidad mantenida actualmente solo por las mafias.
Cuando yo dejé el poder, mi hijo menor tenía apenas 14 años. Incluso se atreven a nombrar a los miembros de mi familia uno por uno, poniendo en riesgo su seguridad. Lo mismo hacen con el exvicepresidente Jorge Glas, que en estos momentos se encuentra en condiciones infrahumanas en una cárcel de máxima seguridad ecuatoriana, secuestrado por el Gobierno de Daniel Noboa, luego de la invasión de la sede diplomática mexicana el 5 de abril de 2024 y pese a su condición de asilado político mexicano. La publicación del Departamento de Estado involucra hasta a su exesposa, de la cual está divorciado hace ya varios años.
Permítanme aclarar:
1.- Ni mi familia ni yo hemos solicitado visa alguna para los Estados Unidos.
2.- En el relato de hechos que expone el Departamento de Estado, basado en la sentencia del “Caso Sobornos”, se omiten aspectos tan relevantes como que INTERPOL se ha negado a tramitar las órdenes internacionales de detención relativas a esa causa, por considerarlas políticas, o que los “condenados” han recibido asilo en países con un Estado de derecho tan sólido como México, Canadá o Bélgica, por considerarlos perseguidos políticos.
3.- En pocos meses se celebrarán elecciones presidenciales en Ecuador, en las que la Revolución Ciudadana parte como favorita y donde Daniel Noboa, ciudadano norteamericano y su muñeco de cartón, se desploma por ineptitud y corrupción. En este caso se evidencia, una vez más, el contenido político de este arbitrario y antijurídico sistema de “sanciones” del poder ejecutivo estadounidense, sin importarles destrozar la verdad y los derechos humanos.
Viví y estudié cuatro maravillosos años en Estados Unidos. En la década en que fui presidente, cuando Ecuador y América Latina hervían de progreso y dignidad, yo trataba de moderar a ciertos colegas progresistas por su profundo sentimiento antimperialista. Me corresponde reconocer que el equivocado era yo» (AVV)
La maldad humana…
Obvian que nadie en el MUNDO ha aceptado la sentencia por «influjo psíquico» y que 5 países han dado asilo político a los involucrados en el Caso Sobornos.
Meten hasta a mi familia.
¡No hay derecho!#LosCorruptosSiempreFueronEllos— Rafael Correa (@MashiRafael) October 9, 2024