Quito: entre la pandemia y la demagogia

Alarmas. La última semana de enero, en Quito se registraron 4.008 nuevos casos de coronavirus.

La Alcaldía ya habla de adquirir vacunas cuando no ha resuelto los problemas en torno a la compra de pruebas para detectar la Covid-19. Expertos coinciden en el refuerzo del testeo.

Un promedio de 82 personas espera una cama en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), en Quito.  “Muchas de las personas que están esperando estas camas UCI posiblemente fallecerán”, dijo Ximena Abarca, secretaria de Salud, pues explicó que los pacientes en UCI permanecen más de 15 días, por lo que la rotación y liberación de camas es lenta.

 Escases de dosis

Que hay vacunas contra la Covid-19 desde 10 dólares, dijo Jorge Yunda, alcalde de Quito, al ser consultado sobre las estrategias para prevenir una segunda ola de contagios en la ciudad.

Aunque el burgomaestre aseguró que están en conversaciones con el Ministerio de Salud y empresas privadas para adquirir las dosis, Saskya Lemus, epidemióloga, dice que preocupa “la demagogia con la que se maneja la crisis sanitaria”.

Lemus explica que a nivel mundial la producción de dosis es limitada, por eso, son los gobiernos centrales los únicos que pueden iniciar negociaciones. “Ni siquiera empresas privadas con gran poder adquisitivo lo logran, no se diga en Quito que está tan golpeado económicamente. Preocupa que hoy haya este discurso cuando lo esencial es reforzar el testeo”, agrega la experta.

Rodrigo Henríquez, docente- investigador de la Universidad de las Américas (UDLA), coincide con que la inversión en estos momentos debería ir destinada a reforzar el sistema de detección de casos para lograr aislamiento temprano.

“Una gran alternativa es pasar de pruebas PCR a pruebas de antígenos que son más rápidas, en 15 minutos tienes los resultados y el costo es menor”, señala Henríquez.

 No es el primer ofrecimiento ‘al aire’

En mayo del 2020, Yunda dijo que Quito sería la primera ciudad de Latinoamérica en procesar 1.500 pruebas diarias.

Actualmente, se realizan un promedio de 400 al día. Esto debido a que el proceso de contratación de un laboratorio que entregue las pruebas y la procese quedó desierto a finales de diciembre.

En Quito la ocupación en UCI es del 96%, pero el 4% ‘libre’ corresponde a población específica, como niños y embarazadas. Linda Guamán, coordinadora técnica de la Secretaría de Salud, explicó que recibieron cinco ofertas, pero todas con errores: cuatro no contaban con la firma digital y una no subió la propuesta digital, requisitos obligatorios, según el Servicio Nacional de Contratación Pública (Sercop).

“Entendemos la consecuencia de esto, pero hay que hacer los procesos de forma transparente, especialmente cuando se trata de una contratación pública”, dijo Guamán, quien en una entrevista pasada informó que la capital cuenta con pruebas hasta febrero. Sin embargo, no se ha hecho un nuevo anuncio sobre el número de pruebas o si existe ya un laboratorio contratado.

Crisis sanitaria y legal

 A la compleja situación de la capital se suma la denuncia en contra de Yunda, interpuesta por el concejal Fernando Morales, por supuestas irregularidades detrás de la compra de pruebas (abril 2020), que se anunciaron como PCR y que descubrió que eran Lamp.

“Se pidió que después de la vinculación se puedan dictar medidas cautelares para el alcalde Yunda, entre ellas la prisión preventiva, para que no ocurra lo que pasó con el exsecretario de Salud (Lenín Mantilla) que está desaparecido”, señaló Morales.

En Quito hay dos casos de la nueva variante de la Covid-19. Un hombre de 64 años y una niña de 12 años. Mantilla es investigado por el caso de la compra de 100.00 pruebas para la detección de Covid-19 en Quito, por un valor de contrato superior a los 4 millones de dólares, en el que está vinculado el exsecretario de Salud.

Morales explicó que el pedido de que se considere un delito de fraude procesal fue debido a la presunta alteración de documentos públicos, actas de entrega – recepción y por incumplir los tiempos adecuados en el contrato que se mantuvo por el procesamiento de las pruebas.

Además, una vez que Mantilla salió de su cargo, la Secretaría de Salud devolvió casi 20.000 pruebas, aunque nunca confirmó que fue porque tenían una baja sensibilidad para la detección, como señala un informe realizado por la Universidad de las Américas. (AVV)

 

Te puede interesar: