Uno de los objetivos es lograr que las iglesias se constituyan en un atractivo similar al de las peregrinaciones en Roma. Para eso se requiere promoción y el involucramiento de la comunidad.
Replicar el modelo romano, donde turistas de todo el mundo esperan pacientemente durante horas para ingresar a icónicas iglesias como la Basílica del Panteón, es lo que se quiere lograr en Quito, ciudad conocida por su riqueza histórica, arquitectónica y por las emblemáticas iglesias del Centro Histórico.
Con una gran cantidad de iglesias que datan de la época colonial, el Casco Colonial de la capital de Ecuador, uno de los mejor conservados de América Latina, podría convertirse en un destino de peregrinación religiosa para visitantes nacionales e internacionales.
Sin embargo, según el administrador general de Quito Turismo, Etzon Romo; y la Gerente General del Quito Tour Bus, Diana Carrasco, aún hay pasos que deben darse para implementar esta nueva faceta del turismo en la ciudad.
Más promoción
La empresa Quito Tour Bus busca reforzar el turismo religioso en Quito mediante una estrategia integral que involucra mayor promoción dentro y fuera del país.
Carrasco explica que esta firma cuenta con una amplia oferta de recorridos que incluyen convenios con iglesias y conventos. «Cada sábado visitamos un lugar diferente porque hay muchas iglesias por ofrecer».
Los recorridos en el bus de dos pisos incluyen circuitos panorámicos, visitas a conventos y el acceso a lugares que por lo general permanecen cerrados al público. Además, la iniciativa busca generar impacto económico en las comunidades locales al incluir servicios y productos locales en los paseos.
Carrasco subraya que existen productos turísticos que se ofrecen regularmente, pero la clave ahora es fortalecer la promoción de estas experiencias. «Es más bien darle fuerza a lo que ya existe. Creemos que hay un gran potencial en el turismo religioso en Quito».
La gerente agrega que el quiteño también debe aprender a ser turista en su propia ciudad. “Queremos invitar a la comunidad a descubrir las maravillas que tienen a su alrededor».
En este sentido, la falta de conocimiento sobre la disponibilidad de museos, horarios de iglesias y la carencia de servicios en línea son obstáculos identificados. «Muchas veces las personas prefieren viajar a otros países y pagar, pero en su ciudad quieren gratis. Es un tema cultural que también debemos valorar», concluye Carrasco.
Nostalgia y desafíos
El gerente general de Quito Turismo, Etzon Romo, expresa su nostalgia por la campaña turística ‘All You Need Ecuador’, que tuvo impacto en Europa y Estados Unidos. También menciona los desafíos que enfrenta la ciudad para aumentar el turismo internacional.
Romo reconoció la complejidad de compararse con ciudades europeas y la competencia que ello conlleva, señalando que en el Vaticano, por ejemplo, todo el turismo gira en torno a la religión.
A pesar de que las iglesias quiteñas son hermosas, Romo enfatiza que los turistas buscan experiencias más allá del turismo religioso.
Cita el caso de Madrid y Barcelona (España), donde los visitantes pasan tiempo explorando iglesias pero también se sumergen en recorridos gastronómicos y disfrutan de una conectividad eficiente con otras ciudades, a través de trenes rápidos.
En el caso de Quito, Romo identificó varias barreras que limitan el potencial turístico. La inseguridad es una preocupación, al igual que la falta de conectividad con Sudamérica.
Mientras Europa cuenta con conexiones aéreas establecidas, Quito carece de una red similar, dificultando la llegada de turistas internacionales.
Sobre la inseguridad, subraya la necesidad de revitalizar estrategias similares para atraer turistas y vencer la coyuntura desfavorable actual, donde Quito se percibe como el «semáforo rojo», siendo, según él, la ciudad más segura de visitar.
Además, señala la falta de una agenda de política pública y la inversión del Gobierno Central como factores críticos. A pesar de contar con recursos, Romo expresa la necesidad de un respaldo gubernamental para competir eficazmente en el panorama turístico internacional.
El arribo de turistas canadienses y mexicanos y actos litúrgicos como el Arrastre de Caudas, que ya solo se realiza en Quito, son hechos que Carrasco considera que deben potenciarse.
Dicha ceremonia, llegó en el siglo XVI desde España hasta el virreinato de Lima y se empezó a practicar en Quito, cuando la ciudad tuvo su independencia eclesiástica y fue reconocida como diócesis.
Durante la procesión, ‘canónigos’, sacerdotes y fieles participan en una representación simbólica de los pecados del mundo, iluminando el camino con cirios y portando una cruz que contiene una astilla del madero de la crucifixión de Jesús. (EC)
93.000 turistas recibió Quito este año por Carnaval. En 2023 fueron 90.000.
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